Educación pública

Desde hace algún tiempo, los padres tenemos derecho a que nuestros hijos estudien en colegios públicos o concertados cercanos a nuestros domicilios. Por esa razón, entre otras, pagamos impuestos. Pues bien, en algunos centros concertados además es necesario lo que llaman "vinculación de la familia" al colegio o a la institución que lo regenta, y eso suena simplemente a "enchufe".Al menos así consta en la carta que el colegio Santa María del Pilar (Reyes Magos, 3) acaba de remitirnos y en la que "lamenta comunicar que no ha sido posible admitir" a nuestra hija en él. Consultada la llamada "comi...

Desde hace algún tiempo, los padres tenemos derecho a que nuestros hijos estudien en colegios públicos o concertados cercanos a nuestros domicilios. Por esa razón, entre otras, pagamos impuestos. Pues bien, en algunos centros concertados además es necesario lo que llaman "vinculación de la familia" al colegio o a la institución que lo regenta, y eso suena simplemente a "enchufe".Al menos así consta en la carta que el colegio Santa María del Pilar (Reyes Magos, 3) acaba de remitirnos y en la que "lamenta comunicar que no ha sido posible admitir" a nuestra hija en él. Consultada la llamada "comision de admisiones" (que, a pesar de ese nombre tan grandilocuente, en realidad está compuesta por un profesor y una madre), ésta acepta que, además de cercanía al domicilio, también cuentan otro tipo de criterios, como si los padres son antiguos alumnos u otra clase de relación.

Aunque mi hija tiene tres años y a esa edad la educación no es obligatoria, la comision de admisiones ya ha asegurado que será difícil que pueda entrar en el colegio en años sucesivos. Por otra parte, la escuela pública más cercana, Escuelas Aguirre, no dispone de presupuesto para atender a ninos de tres años. Por lo que parece, los recortes que este Gobierno está realizando a la educacion pública obligan a los padres a costear una guardería, lo que no siempre es factible. Así que, padres y madres de Madrid, un consejo para el futuro: tengan en cuenta que su derecho como contribuyentes y como españoles a la educación de sus hijos en el centro más cercano a su domicilio o lugar de trabajo no sirve de nada.

Es imprescindible disponer de un contacto dentro. Como en los mejores tiempos de este país...- . .