Francia debate una ley que reduce los anuncios en la televisión pública

Los diputados franceses comenzaron ayer la discusión de un proyecto de ley destinado a regular el sector audiovisual. Una de las principales propuestas de la ministra de Cultura, Catherine Trautmann, es la reducción del tiempo de publicidad en los canales públicos, que pasa de 12 a 8 minutos por hora (las películas no pueden interrumpirse en la televisión pública), lo cual significa que France2 y France3 dejarán de ingresar 1.000 millones de francos. El mismo proyecto prevé una compensación estatal por la exoneración del canon, de la que se beneficia el 50% de la población -no pagan esa tasa l...

Los diputados franceses comenzaron ayer la discusión de un proyecto de ley destinado a regular el sector audiovisual. Una de las principales propuestas de la ministra de Cultura, Catherine Trautmann, es la reducción del tiempo de publicidad en los canales públicos, que pasa de 12 a 8 minutos por hora (las películas no pueden interrumpirse en la televisión pública), lo cual significa que France2 y France3 dejarán de ingresar 1.000 millones de francos. El mismo proyecto prevé una compensación estatal por la exoneración del canon, de la que se beneficia el 50% de la población -no pagan esa tasa los que no alcanzan cierto nivel de ingresos-, con lo cual el Estado entregará 2.400 millones de francos al año suplementarios a la televisión pública."Lo importante es que France2 deje de tener que imitar la programación de TF1 por razones de audiencia y de ingresos publicitarios", dice la ministra.

Se trata de una ley que comenzó a elaborarse en el verano de 1997; que fue retirada hace apenas un año porque los diputados socialistas la consideraron demasiado tímida y que ahora reaparece, modificada. Una de las novedades es la incorporación a los consejos de administración de France2 y France3 de telespectadores elegidos por sorteo, que opinarán sobre la programación.

Las televisiones privadas no ven modificada su reglamentación publicitaria (se permite sólo un corte durante la emisión de largometrajes) pero sus cambios de propiedad estarán ahora más controlados por el CSA (Consejo Superior del Audiovisual). Este organismo independiente, que hasta ahora podía imponer multas y retirar la concesión de frecuencias, podrá, además, castigar a los infractores con penas de "pantalla negra y silenciosa" que van desde uno a diez minutos.