IU exige a Urbanismo de Sevilla que expropie los edificios protegidos desatendidos por sus dueños

El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Sevilla, Luis Pizarro, pidió ayer a la Gerencia de Urbanismo que expropie los edificios protegidos cuyos propietarios hayan incumplido sus deberes de conservación. Pizarro se acerco ayer a un patio de vecinos en la trianera calle Pagés del Corro, donde tres familias fueron desalojadas ante el peligro de derrumbamiento. Los desahuciados se quejaron del trato de recibido por parte de la Gerencia, que les ofreció pernoctar en un albergue. Una asistente social les desaconsejo ir por las malas condiciones en las que se encuentra.

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El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Sevilla, Luis Pizarro, pidió ayer a la Gerencia de Urbanismo que expropie los edificios protegidos cuyos propietarios hayan incumplido sus deberes de conservación. Pizarro se acerco ayer a un patio de vecinos en la trianera calle Pagés del Corro, donde tres familias fueron desalojadas ante el peligro de derrumbamiento. Los desahuciados se quejaron del trato de recibido por parte de la Gerencia, que les ofreció pernoctar en un albergue. Una asistente social les desaconsejo ir por las malas condiciones en las que se encuentra.

La familia de Concepción Candela lleva más de 70 años viviendo en este patio de vecinos, situado en la calle Pagés del Corro, en Triana. El martes 6 de abril a las 17.00 se encontró con una delegación de la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla acompañada por policías locales que le anunciaban, a ella y a dos familias más, la obligación de abandonar su casa inmediatamente ya que había posibilidad de derrumbe por la oxidación de las columnas del techo. No le dieron opción a nada. Precintaron la puerta de su casa y le facilitaron la dirección de un albergue del Ayuntamiento para pasar la noche. Casualmente, un cuarto de hora después se desplomaba un edificio situado en la calle Bustos Tavera donde moría una persona. Ambos edificios están catalogados con un nivel de protección C, es decir, la normativa urbanística los remite a la ley del Patrimonio Histórico, por lo que no pueden ser demolidos, sólo reformados parcialmente y recibir actuaciones de conservación. Dos ejemplos del abandono por parte de sus propietarios de edificios protegidos en el casco histórico de la capital andaluza. El portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Sevilla, Luis Pizarro, visitó ayer este patio de vecinos y solicitó a la Gerencia de Urbanismo que cumpla con la ley, y expropie estos edificios por incumplimiento sistemático por parte de sus propietarios de las normas de conservación. "Entre la dejadez de los propietarios y la ineficacia de la Gerencia de Urbanismo a la hora de supervisar el estado de estos edificios, se está perdiendo parte del patrimonio histórico y social de nuestra ciudad", sentenció Pizarro. El portavoz de la federación de izquierdas comentó que la expropiación sería una medida ejemplarizante, "para lanzar un mensaje a los propietarios y se decidan a actuar en consecuencia". Pizarro añadió que en caso de que estos no puedan pagar las obras de conservación de los inmuebles protegidos, "debería ser el Ayuntamiento quien afrontara los gastos de conservación". Además, criticó la "ineficaz" labor de vigilancia que lleva a cabo el consistorio sevillano, "que deberían ser sistemáticas, y no llegar a toro pasado, como en este caso donde actúa subsidiariamente, haciendo un apuntalamiento". Mientras, las familias desalojadas pasaban a través de los andamios al interior de sus casa para poder recoger algunas de sus pertenencias. Concepción Candela se quejaba que desde el desalojo, el martes 6 de abril, no habían podido acceder hasta ayer a sus viviendas. Candela afirmó que "nos ofrecieron ir a dormir a un albergue del Ayuntamiento en la calle Gravina, pero luego hablé con una asistenta social y me aconsejó que no fuera, que estaba lleno de cucarachas y suciedad". A José Luque, otro de los desahuciados, le dijeron que se fuera a una residencia de ancianos. De momento está con un familiar. La heredera del propietario del inmueble, María Josefa Garnocha, hace tres años que no aparece por allí. El resto de las nueve familias que viven en este patio temen que la próxima les toque a ellos.

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