Como ganado al matadero

Esta mañana no ha sido la primera vez que, en el metro, todos los viajeros nos sentimos como ganado de camino al matadero. Sí que ha sido la primera vez que vi a pasajeros liándose a puñetazos para abrirse paso a un vagón que reventaba, cuando, después de más de media hora, nadie había conseguido subirse a uno de los pocos trenes que habían pasado.En el resto de Europa se fomenta la idea de que utilizar el transporte público, y más en hora punta, es un acto de civismo; el metro es utilizado sin el menor complejo por todas las clases sociales.

Sin embargo, en Madrid, sólo quien no tiene...

Esta mañana no ha sido la primera vez que, en el metro, todos los viajeros nos sentimos como ganado de camino al matadero. Sí que ha sido la primera vez que vi a pasajeros liándose a puñetazos para abrirse paso a un vagón que reventaba, cuando, después de más de media hora, nadie había conseguido subirse a uno de los pocos trenes que habían pasado.En el resto de Europa se fomenta la idea de que utilizar el transporte público, y más en hora punta, es un acto de civismo; el metro es utilizado sin el menor complejo por todas las clases sociales.

Sin embargo, en Madrid, sólo quien no tiene más remedio tiene que someterse al trato vejatorio que la EMT dispensa a sus clientes.

Por ello deduzco que en Madrid el civismo es para los menos pudientes y los masocas, y también deduzco que a los responsables de la ciudad les interesa que se siga fomentando el transporte particular.

¿A lo mejor alguien me puede explicar a qué se debe esta política? Se lo agradecería.-