La interventora pide cárcel para la alcaldesa de Nuevo Baztán

El Juzgado número 3 de Arganda del Rey ha decretado un auto de apertura de juicio oral en la Audiencia Provincial de Madrid contra la alcaldesa de Nuevo Baztán (2.100 habitantes), Pilar Medina, del PP. La regidora está acusada de un presunto delito de prevaricación y otro de coacciones contra la secretaria general, e interventora del Ayuntamiento, Rosa Blasco. La secretaria pide, según hizo público ayer su abogado, tres años de prisión para Medina y otros 10 más de inhabilitación para cargo público.Según relató ayer Javier Ortega, abogado de Blasco, "la alcaldesa siente una verdadera animadver...

El Juzgado número 3 de Arganda del Rey ha decretado un auto de apertura de juicio oral en la Audiencia Provincial de Madrid contra la alcaldesa de Nuevo Baztán (2.100 habitantes), Pilar Medina, del PP. La regidora está acusada de un presunto delito de prevaricación y otro de coacciones contra la secretaria general, e interventora del Ayuntamiento, Rosa Blasco. La secretaria pide, según hizo público ayer su abogado, tres años de prisión para Medina y otros 10 más de inhabilitación para cargo público.Según relató ayer Javier Ortega, abogado de Blasco, "la alcaldesa siente una verdadera animadversión" hacia su cliente, "razón por la que ha intentado deshacerse de ella abriéndole expedientes disciplinarios, suspendiéndola de empleo y sueldo cuatro meses y dándole como despacho un cuchitril". Los expedientes disciplinarios abiertos contra la secretaria, que también ejerce la labor de interventora en el Consistorio, aluden a la inexistencia de las cuentas de los ejercicios de 1992, 1993 y 1994 y a su negativa a convocar un pleno con menos de dos días hábiles de antelación, según Javier Ortega.

Auténtico calvario

La alcaldesa, según el letrado, retiró a Rosa Blasco de las labores de intervención para "impedir el acceso de la secretaria a las cuentas y poder crear la figura de una vicesecretaria-interventora a su gusto". Ortega considera además que la secretaria "está soportando un verdadero calvario" y expresa que "la única culpa de Rosa es ser una buena amiga de la anterior alcaldesa [Estrella Ortí, independiente], a la que Medina tiene un auténtico odio".Rosa Blasco salió en 1995 del Ayuntamiento de Nuevo Baztán para dedicarse a una comisión de servicio en la Comunidad de Madrid y regresó a su labor como secretaria el 7 de julio de 1997, fecha en la que Pilar Medina ya había ofrecido el puesto a una persona de su confianza. Una vez se hubo reincorporado a su trabajo, Javier Ortega expresa que "a la secretaria se le prohibió hacer uso de los administrativos del Ayuntamiento".