Mensaje de un joven
Querido alcalde de Fuenlabrada, soy un joven de su localidad y me he enterado de que se quiere gastar el dinero en otro polideportivo y en un equipo ciclista. Créame, la juventud de ahora ha cambiado: nos gustan los deportes, sí, pero también hay que dar de comer al alma y queremos espacios de compromiso, queremos que se creen servicios por parte del Ayuntamiento, movimientos canalizadores de servicio a la sociedad; voluntariado, sí, pero con fines para que algún día se pueda trabajar profesionalmente en ello; qué mejor trabajo que ayudar a los demás, y si encima te pagan por ello, la gloria.D...
Querido alcalde de Fuenlabrada, soy un joven de su localidad y me he enterado de que se quiere gastar el dinero en otro polideportivo y en un equipo ciclista. Créame, la juventud de ahora ha cambiado: nos gustan los deportes, sí, pero también hay que dar de comer al alma y queremos espacios de compromiso, queremos que se creen servicios por parte del Ayuntamiento, movimientos canalizadores de servicio a la sociedad; voluntariado, sí, pero con fines para que algún día se pueda trabajar profesionalmente en ello; qué mejor trabajo que ayudar a los demás, y si encima te pagan por ello, la gloria.Dejemos de gastar el dinero en motocacas y creemos servicios que ayuden a nuestros ancianos a vivir en su casa, servicios de emergencia, como leía hace poco que había una iniciativa a la cual no harán ni caso.
Pero esto, creado por el Ayuntamiento, no por entidades nacionales que sólo van a su autobombo, que el dinero sea de los fuenlabreños y el esfuerzo del pueblo el que revierta en quien genera ese dinero; salvemos nosotros mismos con nuestras gentes y no nos dejemos querer por organismos que, porque sean baratos de contratar, nos solucionen la papeleta de cara a la galería, pero luego no funcionen de verdad.
Si quieren una juventud sana, dennos posibilidad de ayudar a esta sociedad y la posibilidad de trabajar para conseguir un mañana más humano, con ello acabaremos con la intolerancia y el enchufismo, pero ¡qué quiere!, si ni siquiera nos preguntan: todo para la juventud, pero sin la juventud.-