Wolfgang Clement, la derecha del 'nuevo centro' alemán

Al socialdemócrata Wolfgang Clement, el jefe del Gobierno del land de Renania del Norte-Westfalia, no le gustan las etiquetas que dividen al equipo de Gerhard Schröder en "modernizadores" y "conservadores". Clement, de 58 años, es un político pragmático y poco dado a la filosofía, por lo que resulta inútil provocarlo a una disquisición sobre los rasgos de la "escuela de Düsseldorf", entendida como la forja de la teoría del nuevo centro de la socialdemocracia alemana. En el nuevo equilibrio de la política alemana, Clement tiene varios papeles importantes Este políti...

Al socialdemócrata Wolfgang Clement, el jefe del Gobierno del land de Renania del Norte-Westfalia, no le gustan las etiquetas que dividen al equipo de Gerhard Schröder en "modernizadores" y "conservadores". Clement, de 58 años, es un político pragmático y poco dado a la filosofía, por lo que resulta inútil provocarlo a una disquisición sobre los rasgos de la "escuela de Düsseldorf", entendida como la forja de la teoría del nuevo centro de la socialdemocracia alemana. En el nuevo equilibrio de la política alemana, Clement tiene varios papeles importantes Este político enérgico, que fue periodista y más tarde ministro de Economía regional, ha protagonizado el cambio generacional en Renania del Norte-Westfalia, al suceder al veterano Johannes Rau al frente del land.

Clement, por la derecha, y el ministro de Hacienda, Oskar Lafontaine, por la izquierda, acotan hoy el terreno en el que se mueve, a veces erráticamente, el canciller Schröder. Mientras Lafontaine conecta el Gobierno con el electorado clásico de la socialdemocracia y se concentra en aliviar la carga fiscal de las familias trabajadoras, Clement hace de puente con el empresariado y trata de evitar que la reforma fiscal inicialmente planeada por el SPD ahogue a la pequeña y mediana empresa, en vez de estimularla. Clement se ha convertido en el paladín de una reforma más radical que reduzca los impuestos empresariales más deprisa de lo que propone el programa de coalición. Y no sólo eso, sino que también ha tomado la bandera de las regiones, para desempeñar entre los socialdemócratas el mismo papel de contrapeso al Gobierno federal que ha representado Edmund Stoiber, el dirigente del land de Baviera, para el Gobierno del democristiano Helmut Kohl.

Intereses regionales

En noviembre, Stoiber visitó a Clement en Düsseldorf (la capital de Renania del Norte-Westfalia) y ambos mostraron que para ellos los intereses de sus regiones son superiores a los de sus respectivos partidos. "Baviera y Renania del Norte-Westfalia son los länder más grandes de Alemania. Stoiber y yo debemos hablar porque tenemos intereses comunes que debemos defender conjuntamente, no para hacer política de partido", comenta Clement. Pero a diferencia de Stoiber, Clement no quiere acudir al Tribunal Constitucional para lograr un nuevo reparto de los flujos financieros entre el centro y los länder. Espera que la federación contribuya en mayor medida a la economía del land con fondos para investigación y desarrollo que ahora se reparten a otras regiones.

Baviera y Renania del NorteWestfalia también quieren cambiar el carácter de las relaciones con Bruselas. "En la UE", dice Clement, "las tendencias a la burocratización son muy fuertes. Debe haber más claridad sobre lo que debe hacer Bruselas y lo que debe dejar a los Gobiernos de los Estados nacionales". A Bruselas le corresponden, dice, "las grandes tareas de la política exterior" o "el marco de la política laboral, pero no las reglas en detalle". "Las directrices de la Comisión responden a sentimientos de omnipotencia burocrática", añade.

Con el inminente traslado de la capital a Berlín se acaba la época en que Renania del Norte-Westfa lia era el corazón de Alemania y la sede de su capital: Bonn. Clement, que en una ocasión se refirió a la mudanza como "un viaje al pasa do", trata hoy de ver de forma positiva el desafío. "La mudanza a Berlín acelerará el proceso de orientación de Renania del Norte-Westfalia a Europa", dice. "El traslado es un acontecimiento nacional en el marco de un proceso europeo. Desde el punto de vista económico, no tiene mucho sentido, ya que responde a la situación de Alemania tras la reunificación. Nosotros, sin embargo, ya henos superado esta decisión política", señala Clement.

Mientras Berlín y Brandenburgo se orientarán hacia los Estados de Centroeuropa y el Este, Renania del Norte-Westfalia lo hará hacia Occidente, lo cual, según Clement, no deja de estar en consonancia con el deseo de Konrad Adenauer, el padre de la Alemania de posguerra, de crear una Alemania europea.