El PSC exige responsabilidades por la falta de inversiones en el Garraf

El PSC ha bautizado como "la venganza del Departamento de Cultura" la reducción de las inversiones culturales de la Generalitat en el Garraf a causa de que el consejo de esta comarca y el Ayuntamiento de Vilanova cuestionaron la adjudicación directa de la autopista A-16. Los socialistas consideran que esta actuación constituye una muestra del clientelismo político que practica CiU y mantienen que "las responsabilidades políticas en este asunto no deben limitarse a un cargo intermedio".

Joaquim Nadal considera que el caso del Garraf constituye "un ejemplo paradigmático del grado de vicio...

El PSC ha bautizado como "la venganza del Departamento de Cultura" la reducción de las inversiones culturales de la Generalitat en el Garraf a causa de que el consejo de esta comarca y el Ayuntamiento de Vilanova cuestionaron la adjudicación directa de la autopista A-16. Los socialistas consideran que esta actuación constituye una muestra del clientelismo político que practica CiU y mantienen que "las responsabilidades políticas en este asunto no deben limitarse a un cargo intermedio".

Joaquim Nadal considera que el caso del Garraf constituye "un ejemplo paradigmático del grado de vicio que se ha instalado en la Administración catalana". El Partit dels Socialistes (PSC) iniciará acciones parlamentarias y pedirá responsabilidades públicas al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, y al consejero de Cultura, Joan Maria Pujals. Nadal no descartó que a tenor de estas acciones puedan exigirse dimisiones: "El Gobierno de CiU debe extirpar, erradicar quirúrgicamente estas prácticas viciosas". El líder parlamentario del PSC argumenta que la primera vulneración de la legalidad se encuentra en la fórmula de adjudicación de las obras del segundo tramo de la A-16, contra la que presentaron recursos el ayuntamiento de Vilanova y el Consejo Comarcal del Garraf, y la segunda aflora "en el intento de la Generalitat de tomar represalias contra quienes se opusieron a un procedimiento que incluso ha sido declarado ilegal por una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña". Nadal entiende que la retirada de subvenciones de la Generalitat a ayuntamientos y consejos supone "un castigo visceral a las administraciones locales". Una nota hecha pública ayer por el PSC mantiene que el clientelismo político es una práctica habitual del Gobierno de Convergència i Unió (CiU), a pesar de que en contadas ocasiones se destapa públicamente como en esta ocasión. El PSC asegura que el escaso control de la situación demostrado por Pujol constituye una muestra de que "ha agotado la capacidad para ocultar las actuaciones más burdas de su gobierno". El "castigo" económico que se ha impuesto al Ayuntamiento de Vilanova y al Consejo Comarcal del Garraf se advierte en la exclusión de los proyectos de estas administraciones de la lista de subvenciones culturales que se nutren del 1% del coste total de las obras públicas. Pero fue el director general de Patrimonio Cultural, Josep Maria Huguet, quien, en público, argumentó la exclusión de la lista "porque estas instituciones recurrieron contra la construcción de la autopista en el tramo Sitges-Coma-ruga". El presidente del Consejo Comarcal, Víctor Forgas, del PSC, escuchó en directo las palabras de Huguet y las calificó de "chantaje a las instituciones". Forgas mantiene que el secretario general del Departamento de Política Territorial, Josep Grau, le aseguró que las declaraciones de Huguet le costarían el cargo. Grau negó esta versión y dijo que las ayudas del 1% que corresponden a la A-16 todavía están por decidir. Desde el Departamento de Cultura no se han desmentido las declaraciones de Huguet, pero sí se ha negado la posibilidad de su dimisión. El Departamento de Política Territorial y Obras Públicas mantiene que Cultura se precipitó a la hora de elaborar la lista y que ya se está preparando otra en la que sí se prevén los proyectos que pretendían impulsar el Ayuntamiento y el Consejo Comarcal. El alcalde de Vilanova y la Geltrú, Esteve Orriols, de CiU, que gobierna en minoría, confía en recibir 18 millones de pesetas correspondientes al 1% cultural que, según afirma, le prometió verbalmente Macias.