"La Constitución de EEUU se creó para servir a los poderosos"
Le han tachado de antipatriota, irreverente y desleal. Howard Zinn, profesor e historiador estadounidense, ha soportado todo tipo de calificativos. Su delito: haber escrito La otra historia de los Estados Unidos, un libro que repasa los más de 200 años de su país desde una perspectiva muy alejada de la versión oficial. Zinn destroza en sus páginas el gran mito de la modernidad. Estados Unidos no es ni tan libre ni tan democrático, según su investigación. "La Constitución de Estados Unidos", asegura, "se creó para servir a los intereses de los poderosos". Zinn se embarcó en esta aventura diside...
Le han tachado de antipatriota, irreverente y desleal. Howard Zinn, profesor e historiador estadounidense, ha soportado todo tipo de calificativos. Su delito: haber escrito La otra historia de los Estados Unidos, un libro que repasa los más de 200 años de su país desde una perspectiva muy alejada de la versión oficial. Zinn destroza en sus páginas el gran mito de la modernidad. Estados Unidos no es ni tan libre ni tan democrático, según su investigación. "La Constitución de Estados Unidos", asegura, "se creó para servir a los intereses de los poderosos". Zinn se embarcó en esta aventura disidente por una cuestión exclusivamente educativa. Se negaba a recomendar a sus alumnos universitarios en Boston libros de texto que no ofrecían, en su opinión, una visión adecuada del conjunto de la historia de su país. "Había muchas publicaciones escritas desde un punto de vista progresista, pero ninguno abarcaba de forma global los 200 años de existencia de los Estados Unidos", afirmó en San Sebastián, donde la semana pasada impartió una conferencia en el Koldo Mitxelena. La mirada histórica de Zinn busca la complicidad con los sectores más desprotegidos política y económicamente de Estados Unidos. El autor se empeña en demostrar que también en el país democrático por excelencia el pueblo es ignorado por el poder. Zinn mantiene que la historia que se enseña en las escuelas norteamericanas es falsa o que por lo menos oculta datos importantes para comprender la situación del país. "Los americanos aprenden en el colegio que los padres fundadores fueron los grandes creadores de la Constitución", dice. "Pero nadie les enseña que fueron un grupo de hombres, todos ricos y blancos, que no buscaban crear un Estado, sino construir un sistema que no fuera pasto de las rebeliones". Y añade: "La Constitución se creó para servir a los intereses de los poderosos, para que los ricos continuaran siéndolo y mantuvieran sus privilegios". Ni la tan reivindicada era de la prosperidad de EEUU está libre de las mentiras: fue, según Zinn, un momento en el que "una serie de reformas sirvieron para ocultar que esa fue la época en la que más negros fueron linchados". A su juicio, "el mito de la prosperidad ha servido para ocultar en determinados momentos de la historia anexiones territoriales muy violentas como la de México o California". La versión de este historiador, que rescata la verdad de los estratos sociales más desprotegidos, despertó la inquietud de sus conciudadanos por aproximarse más a una realidad joven, pero menos idílica de lo que se supone. La controversia que se creó en torno a La otra historia de Estados Unidos le ha servido a Howard Zinn para vender más de 500.000 ejemplares de su libro, que ahora edita en castellano la editorial Hiru.