Roca se suma a Clos y reclama que el AVE llegue a la Sagrera en el 2004

Ser representante municipal (o aspirar a serlo) confiere carácter. Así se explica que dos destacados dirigentes de CDC, el concejal en Barcelona Miquel Roca y el candidato a la alcaldía de la ciudad, Joaquim Molins, hayan hecho causa común con las reivindicaciones de Joan Clos. El alcalde de Barcelona exige que se cumplan los pactos que prevén la llegada del AVE a la Sagrera en el 2004. Los tres discrepan del presidente Jordi Pujol, quien apoya a Fomento en posponer la Sagrera en favor de Sants.

Miquel Roca se convirtió ayer en un firme defensor de la estación del AVE en la Sagrera. Ocu...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Ser representante municipal (o aspirar a serlo) confiere carácter. Así se explica que dos destacados dirigentes de CDC, el concejal en Barcelona Miquel Roca y el candidato a la alcaldía de la ciudad, Joaquim Molins, hayan hecho causa común con las reivindicaciones de Joan Clos. El alcalde de Barcelona exige que se cumplan los pactos que prevén la llegada del AVE a la Sagrera en el 2004. Los tres discrepan del presidente Jordi Pujol, quien apoya a Fomento en posponer la Sagrera en favor de Sants.

Miquel Roca se convirtió ayer en un firme defensor de la estación del AVE en la Sagrera. Ocurrió durante el plenario que se celebró en el Ayuntamiento de Barcelona. El líder de la oposición municipal hizo causa común con Joan Clos y afirmó: "La Sagrera es absolutamente incuestionable porque, si no tenemos la Sagrera, veo muy difícil el enlace con Francia". El dirigente de CiU no rechaza la construcción de Sants siempre que se haga de forma simultánea y sin postergar la de la Sagrera. "Lo fundamental es que llegue a la Sagrera", dijo, "porque hemos vinculado un cierto concepto de ciudad a esta opción que es irrenunciable para Barcelona". Roca expresó también su convicción de que es imprescindible que el AVE llegue a Francia en el año 2004. El ex secretario de CDC coincide con Joaquim Molins, quien ayer mostró su disposición a exigir el cumplimiento de los pactos que incluyen la llegada del AVE a Barcelona, por la Sagrera, y a Francia en el año 2004. Ambos discrepan de otros dirigentes de su propio partido, entre ellos el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, quien expresó anteayer su comprensión ante las modificaciones anunciadas por el Ministerio de Fomento. Su titular, Rafael Arias Salgado, anunció que el AVE entraría por el aeropuerto y llegaría a Sants en el 2004, pero dejó en el aire el cumplimiento del resto de los compromisos, entre ellos la Sagrera y la llegada a Francia. En el lado opuesto, el alcalde de L"Hospitalet, Celestino Corbacho, calló sobre la Sagrera y defendió los beneficios que las propuesta de Fomento suponen para su municipio, al soterrar las vías. Con Roca y Clos coincidió también la teniente de alcalde Pilar Roca. De hecho, la única voz discrepante fue la del jefe de filas del Partido Popular, Alberto Fernández Díaz. El dirigente del PP no se atrevió a defender el aplazamiento, pero tampoco reclamó la concreción de los pactos. Afirmó que "es la primera vez que se pone sobre la mesa un proyecto concreto" que asegura la llegada del AVE a la ciudad en el 2004. Clos le pidió que comunicara a sus "compañeros del Gobierno" que Barcelona no puede aceptar "la política de las lentejas". "Si quieres las comes y si no las dejas", dijo en alusión a las peticiones del municipio para participar en las negociaciones sobre el trazado del AVE, desoídas hasta ayer por el Gobierno central y el autonómico. El alcalde reiteró ayer que Barcelona no aceptará su marginación en la toma de decisiones y recordó que el diálogo se ha roto en dos asuntos esenciales para la organización de la ciudad, en la medida en que condicionan la política de transporte: el proyecto del AVE y el pacto sobre la rebaja de peajes y la prolongación de la concesión.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En