Detenidos cinco franceses en Girona cuando pretendían secuestrar a un compatriota

Hasta ahora, el secuestro protagonizado por delincuentes comunes no era frecuente en España, pese a casos sonados como el de la farmacéutica de Olot María Àngels Feliu. Paradójicamente, durante este mes, la policía ha desbaratado en Cataluña dos intentos de secuestro a cargo de sicarios extranjeros.

El primero se produjo el día 3 cuando cuatro matones mexicanos secuestraron por error a un pinchadiscos. El segundo, tuvo lugar el miércoles en Lloret de Mar, población turística costera de Girona, donde fueron detenidos cinco franceses que pretendían secuestrar a un empresario de su misma n...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Hasta ahora, el secuestro protagonizado por delincuentes comunes no era frecuente en España, pese a casos sonados como el de la farmacéutica de Olot María Àngels Feliu. Paradójicamente, durante este mes, la policía ha desbaratado en Cataluña dos intentos de secuestro a cargo de sicarios extranjeros.

El primero se produjo el día 3 cuando cuatro matones mexicanos secuestraron por error a un pinchadiscos. El segundo, tuvo lugar el miércoles en Lloret de Mar, población turística costera de Girona, donde fueron detenidos cinco franceses que pretendían secuestrar a un empresario de su misma nacionalidad por una nebulosa cuestión de deudas vinculadas con el narcotráfico.

La policía, a partir de las pruebas logradas tras la detención de los matones, sostiene que su objetivo era asesinar al empresario, pese a que los sicarios confesaron que su trabajo consistía en secuestrarle y trasladarlo a Francia.

El empresario, de 34 años y cuya identidad no ha trascendido, tiene negocios de restauración, campings y boleras en la ciudad de Carnac (Francia). El empresario, acompañado de una mujer, huyó hace días de su país porque sus acreedores le habían amenazado de muerte si no saldaba sus deudas. Como un turista más, el empresario se estableció en Lloret de Mar intentado pasar desapercibido.

Falsos policías

El pasado día 13, la mujer regresó a Francia, contactó con los acreedores del empresario y les explicó que éste se encontraba en un hotel de Lloret de Mar. Dos días después, los cinco sicarios, a bordo de un vehículo monovolumen Renault Espace, llegaban a la población española, pero le buscaron en un hotel equivocado, lo que les trastocó los planes.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la marcha improvisaron una nueva estrategia: se hicieron pasar por policías franceses y con un álbum de fotos de su víctima se pusieron a preguntar en calles y comercios sobre el empresario.

Tamaña inconsciencia no podía pasar desapercibida y uno de los interrogados sospechó de los falsos policías y denunció el caso en la Unidad contra la Droga y el Crimen Organizado del Cuerpo Nacional de Policía.

Los agentes verdaderos pusieron manos a la obra y arrestaron a los falsos policías franceses el pasado día 16.

Archivado En