Nuevas sospechas sobre financiación ilegal acosan a los socialistas franceses
Para consuelo de una derecha permanentemente enredada en la madeja de investigaciones judiciales que apuntan al mismísimo presidente Jacques Chirac, la sombra de la sospecha de la financiación ilegal ha terminado también por alcanzar al Partido Socialista (PS) francés. La Fiscalía de París abrió el miércoles dos diligencias por malversación, falsedad, abuso de confianza y encubrimiento contra la Mutua Nacional de Estudiantes de Francia (MNEF), organismo que garantiza la seguridad social de unos 800.000 alumnos y que tradicionalmente ha estado en manos socialistas.Aunque en esta fase preliminar...
Para consuelo de una derecha permanentemente enredada en la madeja de investigaciones judiciales que apuntan al mismísimo presidente Jacques Chirac, la sombra de la sospecha de la financiación ilegal ha terminado también por alcanzar al Partido Socialista (PS) francés. La Fiscalía de París abrió el miércoles dos diligencias por malversación, falsedad, abuso de confianza y encubrimiento contra la Mutua Nacional de Estudiantes de Francia (MNEF), organismo que garantiza la seguridad social de unos 800.000 alumnos y que tradicionalmente ha estado en manos socialistas.Aunque en esta fase preliminar las investigaciones van dirigidas contra sospechosos indeterminados, la presencia de algunos de los nombres que ya figuran en las diligencias, particularmente el de Dominique Strauss Kahn, actual ministro de Economía, y de Jean-Christophe Cabadélis, número dos del PS, garantiza el calor político del asunto. De acuerdo con los datos aportados por la Policía Judicial, el titular de Economía cobró entre 1995 y 1997 unos 600.000 francos (15 millones de pesetas) de honorarios por su trabajo de abogado en las transacciones entre la MNEF y la antigua compañia Generale des Eaux, hoy denominada Vivendi.
La primera de las investigaciones, abiertas a instancias del Tribunal de Cuentas, plantea sobre las relaciones entre la mutua estudiantil y tres sociedades de comunicación, Policité, Smpim y Transim, que trabajaban simultáneamente para el PS durante las campañas electorales, al tiempo que se beneficiaban de los grandes contratos de la MNEF.
Amiguismo
El conjunto de los datos presentes en las diligencias dibujan un panorama de amiguismo, tráfico de influencias y abuso de confianza que incluye, cómo no, la sospecha de los empleos ficticios. Jean-Marie Le Guen, diputado socialista de la capital francesa y antiguo trabajador de la mutua estudiantil, reconoció en junio en una entrevista al diario Le Parisien que la MNEF era "la guardería del Partido Socialista" y una "base de repliegue" del mismo partido. Estas declaraciones, efectuadas en el momento en el que las irregularidades detectadas por el Tribunal de Cuentas empezaban a salir a la luz, fueron desautorizadas por el primer secretario general del PS, François Hollande.La segunda investigación va dirigida a confirmar los indicios de fraude en el "funcionamiento general" de la mutua estudiantil. Además de los empleos ficticios, las pesquisas van dirigidas a esclarecer el curso de los aparentes desvíos de fondos denunciados por el Tribunal de Cuentas, así como las inversiones que la MNEF efectuó en actividades inmobiliarias y comerciales sin relación con los objetivos de la mutua.