El viento derriba la fachada de un edificio en ruinas, sin causar heridos

El viento derribó anoche la fachada y parte de la esquina de un edificio en demolición, en la calle de Juan Bravo, número 8 (Salamanca). La suerte hizo, según opiniones de los bomberos y un portavoz del Samur, que ningún peatón pasara por la acera ni que estuviera trabajando ningún obrero en el momento del derrumbe.La caída se produjo sobre las diez de la noche: parte de la fachada se desplomó de repente. "El ruido fue como cuando se echa el cierre de una tienda, pero muchísimo más fuerte. Cuando he salido estaba toda la calle llena de escombros y había mucho polvo", señaló Jorge Astudillo, vi...

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El viento derribó anoche la fachada y parte de la esquina de un edificio en demolición, en la calle de Juan Bravo, número 8 (Salamanca). La suerte hizo, según opiniones de los bomberos y un portavoz del Samur, que ningún peatón pasara por la acera ni que estuviera trabajando ningún obrero en el momento del derrumbe.La caída se produjo sobre las diez de la noche: parte de la fachada se desplomó de repente. "El ruido fue como cuando se echa el cierre de una tienda, pero muchísimo más fuerte. Cuando he salido estaba toda la calle llena de escombros y había mucho polvo", señaló Jorge Astudillo, vigilante jurado de la Embajada de Italia, que se encuentra frente al edificio siniestrado.

Los técnicos de la gerencia de Urbanismo explicaron en el lugar del suceso que la empresa encargada de la demolición, cuyo nombre se desconocía ayer al cierre de esta edición, había desmontado las dos últimas plantas de las cinco que constaba el edificio. Su error, según los técnicos, fue no quitar a la vez la parte del andamio que no necesitaba. "Se ha producido el llamado efecto vela.

El viento ha tirado de los andamios y de la red de protección hasta derribar la fachada", explicaron. El edificio tenía, según señalaron vecinos de la zona, problemas de estructura. Las obras para su demolición total comenzaron hace unos tres meses. Los bomberos se encargaron de retirar el andamio caído, que carecía de base tras el hundimiento de la fachada. Operarios de la gerencia municipal de Urbaninsmo recogieron durante toda la noche los escombros de la zona. En la caída, los hierros partieron parte de las ramas de los árboles que había frente a la fachada. De hecho, los árboles retrasaron el trabajo de los bomberos. Hasta el lugar se desplazaron tres camiones del servicio de extinción de incendios, una ambulancia del Samur y varias dotaciones de policía municipal. La calle estuvo cortada durante la noche.

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