Cartas al director

Primarias en Sevilla

La señora de los anillos cualquier día se nos sube al caballo de la plaza y echa al suelo al rey San Fernando sólo por ser cristiano. Por el momento, ataca a Borbolla y apoya a Monteseirín para que califique a su oponente de "veneno". El titular de EL PAÍS tiene agallas para arrugar al más pintado y, en sede revanchista, no recuerda que la superiora del convento de San Vicente tiene patente de corso para plantar sus ovarios encima de la mesa y señalar a la derecha como fusiladora nata. Por otro lado, no parece gustarle la caballerosidad borbollesca y eso que de zafia no tiene nada. Me pregunto...

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La señora de los anillos cualquier día se nos sube al caballo de la plaza y echa al suelo al rey San Fernando sólo por ser cristiano. Por el momento, ataca a Borbolla y apoya a Monteseirín para que califique a su oponente de "veneno". El titular de EL PAÍS tiene agallas para arrugar al más pintado y, en sede revanchista, no recuerda que la superiora del convento de San Vicente tiene patente de corso para plantar sus ovarios encima de la mesa y señalar a la derecha como fusiladora nata. Por otro lado, no parece gustarle la caballerosidad borbollesca y eso que de zafia no tiene nada. Me pregunto si a esto se le puede llamar democracia. Algunos piensan que se es demócrata por el mero hecho de ser de izquierda, lo mismo que la derecha presume de ello, sólo y exclusivamente cuando gana unas elecciones. Este lenguaje y atrevimiento podría traducirse por disposición para inclinar la balanza del lado del médico perdido y hallado en el templo de la Diputación, debido a su antecesor. Lástima que Pepe se achique y le dé por la llorona. No es más que un juego de dime y direte, que no conduce a ninguna parte. Yo estoy por él y lo sabe, aunque no he sido nunca matón. En cualquier caso, si él se raja y se siente incapaz para seguir, "aquí estoy yo de nuevo". Dispuesto a presentarme como independiente, aunque no tenga mucho dinero, pero sí la expectativa de revalorizar unos terrenos que habrán de pagarse caros por la belleza natural de su entorno. Espero que no sea el cuento de la lechera. ¡Ay, si yo fuera Romanones, que gastaba el oro y el moro cuando se preparaba para unas elecciones, con las que favorecía a la Monarquía! Pero ya tienen ahí otra oferta mía. Estoy convencido de que si alguien puede ganarle a la derecha en las municipales de la próxima primavera o verano, ese es un servidor de ustedes y, con ello da por celebrado su primer acto electoral. Todavía hay tiempo para formar un equipo solvente y honesto, que lo demás se nos dará por añadidura. José Cabrera Bazán. Coria del Río (Sevilla).

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