Tribuna:

Urbanismo valenciano, modelo de futuro

Tras su aprobación por las Cortes Generales, el día 5 de mayo entró en vigor la Ley del Estado 6 / 98 sobre el Régimen del Suelo y Valoraciones. La conformidad de esta ley con la legislación valenciana es un paso más en el importante desarrollo de la actividad urbanística en esta Comunidad. Así, si en un primer momento, durante los años 1995-1996, se duplicó en ella la inversión urbanizadora respecto del bienio anterior (1993-1994), según la última encuesta sobre programas con datos relativos a fecha de hoy, este ritmo se ha triplicado en el año 1997 y lo que llevamos de 1998 con un total de ...

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Tras su aprobación por las Cortes Generales, el día 5 de mayo entró en vigor la Ley del Estado 6 / 98 sobre el Régimen del Suelo y Valoraciones. La conformidad de esta ley con la legislación valenciana es un paso más en el importante desarrollo de la actividad urbanística en esta Comunidad. Así, si en un primer momento, durante los años 1995-1996, se duplicó en ella la inversión urbanizadora respecto del bienio anterior (1993-1994), según la última encuesta sobre programas con datos relativos a fecha de hoy, este ritmo se ha triplicado en el año 1997 y lo que llevamos de 1998 con un total de 515 actuaciones programadas. Estas cifras son reflejo de un modelo urbanístico cuya aceptación social y aplicación por los distintos sectores institucionales y privados (Administración, promotores, técnicos y propietarios) está produciendo el más importante desarrollo urbanístico de España. Con la consolidación de este modelo hemos conseguido un equilibrio del papel de lo público y lo privado en el proceso urbanístico. En él, se reserva a los poderes públicos las decisiones que aseguran la racional utilización del suelo, plasmadas en el Plan, bajo la premisa de que una buena planificación es la mejor garantía para el correcto uso del suelo. Además se incrementa la presencia de la iniciativa privada mediante la liberalización de la gestión del suelo. Ello supone promover su gestión a través de la figura del agente urbanizador y diferir la urbanización al momento en que, como consecuencia de la demanda del mercado, exista un efectivo compromiso inversor, eliminando el rígido sistema de plazos impuesto por el Texto Refundido de 1992. Al mismo tiempo, se articula un sistema flexible, adecuado a los tiempos y problemas actuales, que supone, por una parte, un menor intervencionismo administrativo, con la supresión de trámites no esenciales del procedimiento y, por otra, un mejor funcionamiento de la Administración, que dinamiza el proceso de aprobación y ejecución de los instrumentos de planteamiento y gestión urbanística, sin afectar a las garantías propias exigibles de todo procedimiento administrativo. Todo ello se traduce en un sistema eficaz, que garantiza una adecuada ordenación del territorio y desarrollo urbano, acorde con la protección y sostenibilidad del medio ambiente y con una política de mejora de la relación calidad-precio en la vivienda. No podemos olvidar que este sistema ha permitido a la Comunidad Valenciana, a pesar de la época de crecimiento económico, mantener, sorprendentemente, los precios de suelo más bajos del mercado nacional, sólo por encima de las comunidades de Extremadura y Murcia. Por ello la actuación del Gobierno valenciano ha sido fundamental en la tramitación parlamentaria de la Ley del Estado sobre el Régimen del Suelo y Valoraciones, logrando la incorporación a la misma de las enmiendas que suponen el respeto de las competencias autonómicas en materia de urbanismo y ordenación del territorio. Potenciando, así, el desarrollo urbanístico de la Comunidad Valenciana mediante un modelo que marca las pautas del urbanismo de futuro. En definitiva, conforme con su política de centro, el Consell, desde el apoyo a la iniciativa privada, ha consolidado un modelo urbanístico que potencia el desarrollo económico y social de los valencianos, dentro de un marco configurado por decisiones de los poderes públicos que asegura la racional utilización del suelo y la necesaria protección de los valores medioambientales.

Fernando Modrego Caballero es subsecretario de Urbanismo y Ordenación Territorial de la Generalitat.

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