Rouco, poco a poco

En 1999 se elige presidente de la Conferencia Episcopal. Aunque los obispos no suelen ser dicharacheros en airear lo que pasa en la cocina, no pocos se las arreglan para sugerir que hay un colega que va a por todas y podría ser el sucesor de Elías Yanes en la presidencia: el arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco, de 61 años, antiguo arzobispo de Santiago.De momento, su obispo auxiliar en la diócesis madrileña, Fidel Herráez, podría competir por el secretariado que abandona José Sánchez. Rouco, considerado siempre como voz de los sectores más conservadores, tiene buena sintonía con el actua...

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En 1999 se elige presidente de la Conferencia Episcopal. Aunque los obispos no suelen ser dicharacheros en airear lo que pasa en la cocina, no pocos se las arreglan para sugerir que hay un colega que va a por todas y podría ser el sucesor de Elías Yanes en la presidencia: el arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco, de 61 años, antiguo arzobispo de Santiago.De momento, su obispo auxiliar en la diócesis madrileña, Fidel Herráez, podría competir por el secretariado que abandona José Sánchez. Rouco, considerado siempre como voz de los sectores más conservadores, tiene buena sintonía con el actual rumbo del Vaticano.

El pasado 17 de enero, en Roma, fue consagrado cardenal por el Papa. Desde que en 1994 llegó al arzobispado de Madrid, Rouco ha moderado sus frecuentes pronunciamientos condenatorios de cuanto pueda oler a izquierda. Pero quienes advierten de su ascensión en la Conferencia Episcopal indican que, aun callando, cabalga.

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