Pasividad municipal
Como miembros de la Junta Directiva de la Asociación de Propietarios del Parque de Lisboa, perteneciente a la localidad de Alcorcón (Madrid), deseamos dar conocimiento a la opinión pública de la situación que venimos padeciendo en los últimos años.La asociación representa a 25.000 habitantes del mencionado municipio. Durante los fines de semana, nuestras calles, plazas y jardines son invadidos por multitud de jóvenes que convierten nuestro barrio en un inmenso bar de copas, presentando la vía pública, el sábado y domingo, el aspecto de un auténtico estercolero.
Pero esto no es lo más gr...
Como miembros de la Junta Directiva de la Asociación de Propietarios del Parque de Lisboa, perteneciente a la localidad de Alcorcón (Madrid), deseamos dar conocimiento a la opinión pública de la situación que venimos padeciendo en los últimos años.La asociación representa a 25.000 habitantes del mencionado municipio. Durante los fines de semana, nuestras calles, plazas y jardines son invadidos por multitud de jóvenes que convierten nuestro barrio en un inmenso bar de copas, presentando la vía pública, el sábado y domingo, el aspecto de un auténtico estercolero.
Pero esto no es lo más grave, pues los vecinos, al margen de no poder descansar, sufren con frecuencia toda clase de vejaciones, cuando no agresiones físicas. También la propiedad privada y el mobiliario urbano están sujetos a todo tipo de actos de vandalismo.
Hemos denunciado estos hechos ante las autoridades municipales, dando cuenta también mediante la remisión de las copias del escrito de denuncia a las autoridades gubernativas.
La respuesta que hemos recibido ha sido una reunión con el segundo jefe de policía y un escrito de la Delegación del Gobierno en el que nos comunican haberse puesto en contacto con la comisaría de Alcorcón. La respuesta de la autoridad municipal la seguimos esperando.
No estamos en contra de ningún local, pues consideramos cualquier actividad comercial legítima, como un bien para el conjunto de la economía del país.
Únicamente pedimos que se respeten nuestros derechos, tanto a poder descansar como a pasear libremente por nuestro barrio.
Pedimos, si es posible, una mayor vigilancia policial, para prevenir los incidentes que hemos señalado.
(Nos consta que, para una población de 150.000 habitantes, sólo dispone la Policía Nacional de un coche patrulla durante el turno de noche).-