Cuarenta argelinos, en su mayoría mujeres y niños, mueren víctimas de una nueva matanza con el sello del GIA
Diversos comandos terroristas, presumiblemente pertenecientes al Grupo Islámico Armado (GIA), el más sanguinario de los que operan en Argelia, asaltaron una aldea aislada y una granja agrícola del Hayut, a 50 kilómetros al oeste de Argel, penetraron en las casas de siete familias y mataron a por lo menos 36 personas, en su mayoría mujeres y niños. La matanza, confirmada por testigos presenciales, es la última de una la larga lista con la que el GIA viene reclamando un Estado islámico desde 1992 a raíz de la anulación de las elecciones legislativas en las que triunfó el Frente Islámico d...
Diversos comandos terroristas, presumiblemente pertenecientes al Grupo Islámico Armado (GIA), el más sanguinario de los que operan en Argelia, asaltaron una aldea aislada y una granja agrícola del Hayut, a 50 kilómetros al oeste de Argel, penetraron en las casas de siete familias y mataron a por lo menos 36 personas, en su mayoría mujeres y niños. La matanza, confirmada por testigos presenciales, es la última de una la larga lista con la que el GIA viene reclamando un Estado islámico desde 1992 a raíz de la anulación de las elecciones legislativas en las que triunfó el Frente Islámico de Salvación (FIS).Los asesinos iban armados con fusiles kaláshnikov, cuchillos y escopetas de caza y, según el relato de los testigos, llegaron al lugar en camiones. Tras la matanza, amontonaron los cadáveres, los rociaron con gasolina y los prendieron fuego. Cuando al día siguiente fueron advertidas las autoridades y llegaron los primeros equipos de socorros, el espectáculo era dantesco: cadáveres mutilados, calcinados e irreconocibles.
Esta nueva acción de las bandas armadas parece obedecer, según fuentes de los servicios de seguridad argelinos, a la intención de distraer la atención para que el Ejército que mantiene desde hace más de 10 días un cerco infranqueable en la región de Atatba, donde fue localizada una fuerte concentración de grupos pertenecientes al GIA, disminuya su presión sobre el reagrupamiento de comandos terroristas.
Tampoco se excluye que se trate de una venganza ante la muerte del emir del GIA, Antar Zuabri, abatido por las unidades especiales del Ejército al mando del general Lammari, noticia aún sin confirmar oficialmente y que presuntos portavoces del GIA han tratado de desmentir a la cadena de radio marroquí Medi-1, primero con una llamada telefónica y posteriormente con un fax con el emblema de la organización. El supuesto comunicado del GIA anuncia que mostrará pruebas de que Zuabri sigue con vida, lo que hasta el momento no ha hecho.
En el ataque de los terroristas contra la aldea y la granja cercanas a Hayut murieron al menos 19 niños menores de 12 años. Los atacantes se llevaron además a cuatro mujeres jóvenes como rehenes. El GIA practica el matrimonio forzado desde que iniciara sus acciones sangrientas hace ahora cinco años.