Chamberí alcanza la inmortalidad

Eusebio Fernández Mingo compró en París la patente de la fórmula de la lejía. Le puso de nombre La Primera y se lanzó a repartirla por Madrid con 12 carros tirados por caballos. También tuvo una empresa litográfica. Nacido en Pozuelo de Alarcón, murió en el barrio de Chamberí en 1943. Por eso figura en el libro Calles y recuerdos de Chamberí, la primera obra que ha escrito Jaime Castillo, un madrileño jubilado. de 55 años. Fernández Mingo es uno de sus personajes favoritos; no sólo porque los unen lazos familiares, sino porque fue de los primeros que apareció durante su investigación.El...

Eusebio Fernández Mingo compró en París la patente de la fórmula de la lejía. Le puso de nombre La Primera y se lanzó a repartirla por Madrid con 12 carros tirados por caballos. También tuvo una empresa litográfica. Nacido en Pozuelo de Alarcón, murió en el barrio de Chamberí en 1943. Por eso figura en el libro Calles y recuerdos de Chamberí, la primera obra que ha escrito Jaime Castillo, un madrileño jubilado. de 55 años. Fernández Mingo es uno de sus personajes favoritos; no sólo porque los unen lazos familiares, sino porque fue de los primeros que apareció durante su investigación.El resultado de los dos años y medio de trabajo de Castillo se presentó hace dos días: un cúmulo de calles, edificios e historias del barrio de Chamberí en orden alfabético. Pero el libro, sobre todo, son personajes. Artistas que vivieron en el barrio, como el pintor Sorolla, al que se le recuerda con su Casa Museo, o los Bellver, escultores, cuya gloria se lleva Ricardo, autor de la imagen de El ángel caído que se retuerce en el parque del Retiro. Hay más figuras y más anécdotas sobre este lugar castizo con nombre extranjero, Chambéry.

Madame Pimentón.

Según el libro, "ejercía la mendicidad con arte. Recorría las calles céntricas con la mano tendida y entonando a media voz arias y romanzas de conocidas óperas y zarzuelas". En junio de 1910 le hicieron un homenaje en el que se reunieron pintores, periodistas y dibujantes. El acto terminó con la lectura de unos versos que le habían dedicado. Falleció ocho años después, con 74, y la cantante Cristina Supervía pagó todos los gastos del entierro.

Uge, 'El Estirao'.

Eugenio Cardiel López, cronista inédito, nació en la calle de Hartzenbusch en 1911. "Tomó el oficio de tapicero por obligación y ejerció de chamberilero por vocación", narra Castillo. Su apodo le viene de ser muy presumido. En el libro Fiestas y tradiciones madrileñas, Pedro Montoliú escribe: "Uge aún recuerda que unos muchachos montaron un espectáculo sólo para hombres. Previo pago de una perra gorda, los asistentes podían ver un pico y una pala". El 17 de junio de 1992 (había muerto el 16 de abril), sus' amigos colocaron una placa donde vivió toda la vida, en el número 19 de la calle de Juan de Austria. El Estirao contaba que los niños de Chamberí aprendían a hablar y a decir piropos al mismo tiempo.Un ejemplo: ''Nena tienes tanto salero / que cuando andas, no pisas: / acaricias el suelo".

Paulino Uzcudun.

El que fuera campeón de Europa, de boxeo residió en el número 7 de la calle de la Santísima Trinidad. Allí todavía vive su familia. El deportista, en 1933, disputó el Campeonato del Mundo de los pesos pesados con Primo Carnera, que lo derrotó. Su primera caída sobre la lona, en un combate contra Joe Luis, le llevó a la retirada y de vuelta a su barrio.

Bodas.

El actor Fernando Fernán-Gómez se casó en 1945 con Dolores [Fernández] Pradera en la iglesia de Santa Teresa y Santa Isabel. En la misma parroquia, coincidiendo con los esposorios de Alfonso XIII y Victoria Eugenia, se celebraron 30 bodas el 31 de mayo de 1906.

Urinarios.

Mientras el pueblo pedía con sorna y rimas ("Tendrá pelitos la rana / y plumas el bacalao; / pero... ¿tendrá evacuatorio / la glorieta de Bilbao?") un urinario para la glorieta de Bilbao, el de la glorieta de San Bernardo es objeto de críticas. Se le acusa de ser "punto de reunión de la tan extendida congregación cultivadora del onanismo", por lo que se propone su supresión.

Bailes de la Bella Unión.

En el siglo XVIII, la quinta del marqués de Santiago (en la plaza de Chamberí, donde hoy está la Junta Municipal) fue uno de los lugares donde se celebraron los bailes de la Bella Unión. Eran fiestas licenciosas, a imagen de otras de la corte francesa. En España motivaron grandes escándalos -y originaron procesos en los que aparecían implicados personajes aristocráticos.

Procesión de la Virgen del Carmen.

Durante la II República no hubo desfiles procesionales. La única excepción, en el verano de 1935, se otorgó a las fiestas de San Cayetano, San Lorenzo y La Paloma, y a las de la patrona de Lavapiés, la Virgen del Carmen.

Fútbol.

El Racing de Madrid, equipo de Segunda División, jugaba en el campo llamado de los Frailes, frente al que ahora es el colegio Eduardo Marquina. Una crónica de 1924 refleja un encuentro contra el Deportivo de Barcelona (hoy Espanyol): "Parece mentira, pero es verdad, que los chamberileros forzasen por tres veces la puerta que defendía el gran Ricardo Zamora".