El Gobierno desoye a CiU y pone en peligro los acuerdos del fútbol y las televisiones

El PP contó con el apoyo del PNV y la abstención de IU

El PP logró ayer por los pelos su propósito primordial con la ley del fútbol. poner en entredicho todos los contratos ya firmados entre los clubes y Antena-3, Canal + y TV-3, operadores rivales de la plataforma de Telefónica. Con los votos a favor del PNV y la abstención de IU, el PP consiguió en la Comisión Constitucional que se diera un empate al votar una enmienda de CiU para que la ley no sea retroactiva. El reglamento de la Cámara rechaza las en miendas en caso de empate. La resolución provocó el enfado de CiU, que consideraba "medular" salvaguardar los derechos "legalmente adquiridos". S...

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El PP logró ayer por los pelos su propósito primordial con la ley del fútbol. poner en entredicho todos los contratos ya firmados entre los clubes y Antena-3, Canal + y TV-3, operadores rivales de la plataforma de Telefónica. Con los votos a favor del PNV y la abstención de IU, el PP consiguió en la Comisión Constitucional que se diera un empate al votar una enmienda de CiU para que la ley no sea retroactiva. El reglamento de la Cámara rechaza las en miendas en caso de empate. La resolución provocó el enfado de CiU, que consideraba "medular" salvaguardar los derechos "legalmente adquiridos". Su ponente en la comisión, Josep López de Lerma, advirtió: "Quiero ver que el PP recapacita".

La consternación embargó a los parlamentarios de CiU, el principal socio del Gobierno, al ver que su enmienda sobre la retroactividad, en línea con las intenciones del PSOE y Coalición Canaria, era derrotada. El texto literal de CiU era el siguiente: "Las disposiciones de la presente Ley no afectarán la vigencia y el ejercicio de todos los derechos legalmente adquiridos mediante contratos celebrados antes del día 21 de febrero de 1997 [fecha en la que el Consejo de Ministros aprobó el proyecto de ley]".De nada le sirvió al ponente catalán, Josep López de Lerma, apelar reiteradamente a la Constitución, "que defiende la libertad de empresa en una economía de mercado y establece que nadie puede ser privado de sus bienes y derechos".

El PP se mantuvo firme. Su ponente, Fernando Fernández Trocóniz, se agarró a la inutilidad de subrayar de forma explícita la no retroactividad, ya que "la ley no afecta a los derechos adquiridos porque no hay tales derechos; en todo caso, son expectativas de derechos". El enredo se acentuó cuando Trocóniz afirmó: "Queremos garantizar la libre concurrencia, que los usuarios de cualquier operador [digital] puedan recibir lo mismo sin necesidad de cambiar de operador". El pasado martes, el presidente de la plataforma de Telefónica, Pedro Pérez, apuntó su intención de compartir los partidos en pago por visión con Canal Satélite Digital si Audiovisual Sport -propietaria de los derechos- aceptaba una oferta.

El artículo 6 de la Ley de Retransmisiones de Acontecimientos Deportivos, referente a las emisiones en sistema de pago por visión en la TV digital, especifica en su apartado 2: "Cualesquiera operadores que acepten las contraprestaciones económicas establecidas por los titulares de los derechos podrán realizar la retransmisión mediante la modalidad de pago por consumo. En todo caso, las condiciones de contratación serán iguales para prestaciones de servicios equivalentes". Su redacción no aclara quiénes son los titulares de los derechos -¿clubes o televisiones?- y deja el terreno abonado para que cualquier operador que acepte ciertas condiciones pueda retransmitir partidos, al margen de las exclusivas existentes.

El PSOE solicitó sin éxito la supresión completa de todo el artículo referente a la televisión digital. También hubo empate: PSOE, CiU y Coalición Canaria votaron a favor; PP y PNV, en contra; e IU se abstuvo. Izquierda Unida expresó que no estaba de acuerdo con la retroactividad y propuso una enmienda que regulara en profundidad las emisiones en televisión de pago, al considerar que la vigencia de los derechos existentes no debe ser la piedra angular de la ley. Fue derrotada y, a renglón seguido, IU optó por no apoyar la intención de CiU. Esta formación quería hacer constar de forma cristalina en una disposición transitona que los contratos no se verán afectados. La abstención de IU favoreció al PP y resultó decisiva. "Ahora, somos la llave y podemos servir de imán al resto de los grupos; trabajaremos de cara a un consenso desde nuestra posición", manifestó Felipe Alcaraz, diputado de IU. El planteamiento de esta formación fue duramente criticado desde las filas socialistas. Jerónimo Nieto (PSOE) se preguntó: "¿Qué pacto de hierro pudieron firmar IU y PP en la Nochebuena de 1996 [fecha en la que se anunció el acuerdo del fútbol entre Antena 3 y Canal + ]?". Para Nieto, el carácter retroactivo de la ley supone una "expropiación" de derechos y "las expropiaciones sólo se pagan con dinero público". Jordi Sole Tura dijo sentirse "degradado" como parlamentario al contemplar lo que en su opinión es una "venganza directa" del PP, "que juega a desmantelar grupos de comunicación con unos derechos en favor de otros que no los tienen".

Un partido en abierto

Al margen del asunto capital de la reatroactividad -que deja en entredicho los ingresos por televisión que han contemplado los clubes para las próximas temporadas-, durante la sesión de ayer en la Comisión Constitucional se limaron diversos aspectos del proyecto de ley que pretendía sacar adelante el Gobierno. Sólo se considerará de "interés general" un partido de Liga o Copa por jornada. Estos encuentros serán determinados en un catálogo que elaborará al principio de la temporada de cada deporte "un Consejo para las Emisiones y Retransmisiones Deportivas, previo informe preceptivo de la Comisión Directiva del Consejo Superior de Deportes y audiencia de las entidades organizadoras, de los operadores, programadores, usuarios y demás interesados". Las televisiones que emitan en abierto tendrán prioridad de elección respecto a las que son codificadas. En casos excepcionales los partidos en abierto podrán darse en diferido. Se aceptó igualmente la posibilidad de que las retransmisiones "puedan atender a todas las lenguas oficiales del Estado".

Quedó suprimido todo el artículo 5 referente a las retransmisiones en televisión de pago, al considerarse que sus limitaciones ya se contemplaban en los apartados dedicados a lo que obligatoriamente deberá ofrecerse en abierto. Igualmente, fue desterrada la intención del Gobierno de prohibir la publicidad en las emisiones de pago por consumo.

Pero la ley aún está en cuarentena hasta su debate en el pleno del Congreso el próximo día 29. Todas las negociaciones son posibles. Se multiplicarán los diálogos entre bambalinas. Aunque López de Lerma fue ayer inflexible: "Hay conversaciones con fecha fijada [encuentro de mañana entre Pujol y Aznar] y no debo echar más leña al fuego que ya existe, pero la no retroactividad es un aspecto medular".

El lunes comenzarán las comparecencias pactadas por los grupos. El primero en ser escuchado será Antonio Asensio, presidente de Antena 3 TV.

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