Aznar acusa a González de buscar "broncas" por sus problemas judiciales

José María Aznar aprovechó ayer la clausura del congreso de los jóvenes del PP para acusar a Felipe González de buscar la "confrontación estéril" e "inventar realidades" por sus problemas con la justicia. "Sí quieren bronca, que la tengan ellos solos", dijo. Mientras Aznar pedía no responder a la provocación, otros dirigentes de su partido volvían al ataque contra el ex presidente, y Narcís Serra, líder del PSC, denunciaba que el "estilo" del PP es "más propio de la confrontación que nos llevó a la guerra civil que del diálogo democrático

Ayer fue otra jornada de ataques y contraataques...

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José María Aznar aprovechó ayer la clausura del congreso de los jóvenes del PP para acusar a Felipe González de buscar la "confrontación estéril" e "inventar realidades" por sus problemas con la justicia. "Sí quieren bronca, que la tengan ellos solos", dijo. Mientras Aznar pedía no responder a la provocación, otros dirigentes de su partido volvían al ataque contra el ex presidente, y Narcís Serra, líder del PSC, denunciaba que el "estilo" del PP es "más propio de la confrontación que nos llevó a la guerra civil que del diálogo democrático

Ayer fue otra jornada de ataques y contraataques verbales entre el partido en el poder y la oposición socialista, aunque Aznar había pedido por la mañana a los suyos moderación, alegando que no debían responder a las provocaciones. "Si algunos tienen problemas con la justicia, son suyos y no los de España", añadió, para apuntar a continuación que "la confrontación por la confrontación es una política estéril e inútil". Sin embargo, Rodrigo Rato, ministro de Economía, volvía al ataque al achacar al PSOE haber pasado de la "derrota dulce" de hace un año "a algo bastante más patético", mientras que el de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, advertía a González que "debería callarse" porque no tiene autoridad moral.El presidente del Gobierno no aclaró la acusación del líder de la oposición contra el vicepresidente primero del Gobierno, Francisco Alvarez Cascos, de haber mantenido contactos con el abogado de los policías José Amedo y Michel Domínguez en el despacho del director de El Mundo, Pedro J. Ramírez, poco antes de que estallase el caso GAL Cascos anunció ayer que esta mañana dará una respuesta al respecto.

Jordi Pujol expresó su voluntad de mantenerse al margen por temor a que, al final, sea CiU la que reciba "las bofetadas". El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, estimó que en la polémica González-Cascos "lo único que hay es mucho que tapar".

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