Una Audiencia 'tomada' por la prensa
Más de un centenar de periodistas de televisión, radio y prensa han recibido acreditación para cubrir el juicio por el caso Alcásser. Dada la falta de espacio en la sala de vistas, que también tiene que acoger a las familias de las víctimas y. al público, se ha habilitado otra dependencia del Palacio de Justicia en la que una parte de los profesionales podrá seguir el juicio a través de un circuito cerrado de televisión.También se han reforzado las medidas de seguridad, que incluyen accesos separados para los asistentes a la vista de la sección segunda de la Audiencia de Valencia, sin p...
Más de un centenar de periodistas de televisión, radio y prensa han recibido acreditación para cubrir el juicio por el caso Alcásser. Dada la falta de espacio en la sala de vistas, que también tiene que acoger a las familias de las víctimas y. al público, se ha habilitado otra dependencia del Palacio de Justicia en la que una parte de los profesionales podrá seguir el juicio a través de un circuito cerrado de televisión.También se han reforzado las medidas de seguridad, que incluyen accesos separados para los asistentes a la vista de la sección segunda de la Audiencia de Valencia, sin posibilidad de pasar a otras zonas del edificio, y viceversa. El Ayuntamiento ha cortado incluso una parte de los carriles de varias calles y zonas que rodean el Palacio de Justicia para que aparquen las unidades móviles de los medios audiovisuales.
Una alfombra y un colchón
A la sala de vistas se han trasladado bancos de otras secciones penales y en el centro se ha colocado una mesa para exponer las pruebas de convicción del sumario (las navajas, la alfombra, una toalla, restos de un colchón de espuma, los trozos de un volante médico con el apellido Anglés que se hallaron esparcidos alrededor de la fosa ... ). No cabrá más que una parte y el resto estará preparado en una pequeña sala anexa, ya que hay más de 300 piezas de convicción. Para cumplimentar la larga lista en lo que le compete, la Guardia Civil ha recuperado hasta un trozo de patata podrida reseñado en el registro de uno de los coches usados por Anglés.
Las acusaciones piden entre 206 y 245 años de prisión para Ricart en un juicio que, si no se suspende, durará por lo menos hasta el 16 de junio, día en que habrán terminado de declarar los 108 testigos y 33 peritos que deberán arrojar luz sobre el triple crimen.
El tribunal juzgador estará presidido por Mariano Tomás Benítez, ayudado por los también magistrados Roberto Beaus Oficial y Carmen Llombart Pérez.