El origen de la disputa
Algunos miembros del Comité Federal del PSOE reconstruyeron ayer lo que dijo Felipe González, el secretario general del partido, sobre Emilio Azcárraga en la reunión de hace dos semanas. Esas supuestas palabras han dado origen a la agria polémica entre los dos principales partidos del país.Según la reconstrucción de lo sucedido efectuada. por este pe riódico, el sábado 8 de febrero tomó la palabra Antonio García Santesmases, diputado y miembro de la corriente crítica Izquierda Socialista, que se lamentaba de que la opinión pública pudiera interpretar que el PSOE se había alineado si...
Algunos miembros del Comité Federal del PSOE reconstruyeron ayer lo que dijo Felipe González, el secretario general del partido, sobre Emilio Azcárraga en la reunión de hace dos semanas. Esas supuestas palabras han dado origen a la agria polémica entre los dos principales partidos del país.Según la reconstrucción de lo sucedido efectuada. por este pe riódico, el sábado 8 de febrero tomó la palabra Antonio García Santesmases, diputado y miembro de la corriente crítica Izquierda Socialista, que se lamentaba de que la opinión pública pudiera interpretar que el PSOE se había alineado sin matices con el proyecto de, plataforma digital Canal Satélite.
Explicaba García Santesmases, no obstante, que era consciente de que, frente a ese proyecto, estaba el que representaba Azcárrága, y citó un libro de Andrés Oppenheimer (México: en la frontera del caos) en el que se cuenta cómo ese empresario dio dinero al Partido Revolucionario Institucional (PRI), en el poder en México.
Diversas fuentes cuentan que González le interrumpió y, sin si quiera presionar el botón del microfono, aseguró que no sólo había dado dinero a esa formación política (en el poder casi 70 años) sino que "al parecer dicen que también dio 25 millones de dólares [unos 3.500 millones de pesetas] al PP".
En cualquier caso, no parece muy probable que ninguna de las 200 personas que le oyeron vaya a rebatir lo que pueda declarar ahora González. Para los socialistas, lo que se afirma en una reunión interna sin voluntad de que trascienda sencillamente no existe. De esta forma, cuando un juez pregunte a González que reafirme o niegue los comentarios que se le imputan, lo más probable es que lo niegue.
Un par de días después, González fue preguntado directamente por el asunto, y replicó en tono de broma: "Ya me andan amenazando por algo que dicen que he dicho. Desde luego ahí tienen a un fiscal general disponible".