El PNV de Vizcaya impulsará una plataforma nacionalista democrática que excluye a HB
La Asamblea Nacional del PNV de Vizcaya acordó ayer impulsar una plataforma de nacionalistas democráticos en la que cabrán partidos políticos, sindicatos, asociaciones y personas que desde la óptica del nacionalismo estén dispuestas a trabajar por la paz en el País Vasco. Los portavoces del PNV, Xavier Atutxa e Íñigo Urkullu, dejaron claro que Herri Batasuna está excluido de momento, por su respaldo a ETA y su falta de autonomía. El PNV rechazó en diciembre y enero pasados la petición formal de HB de crear una asamblea de electos de ambos partidos para avanzar en diversos temas.
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La Asamblea Nacional del PNV de Vizcaya acordó ayer impulsar una plataforma de nacionalistas democráticos en la que cabrán partidos políticos, sindicatos, asociaciones y personas que desde la óptica del nacionalismo estén dispuestas a trabajar por la paz en el País Vasco. Los portavoces del PNV, Xavier Atutxa e Íñigo Urkullu, dejaron claro que Herri Batasuna está excluido de momento, por su respaldo a ETA y su falta de autonomía. El PNV rechazó en diciembre y enero pasados la petición formal de HB de crear una asamblea de electos de ambos partidos para avanzar en diversos temas.
El partido de Xabier Arzalluz reunió ayer en Bilbao a todos los integrantes de su organización en Vizcaya. La Asamblea Nacional regional ordinaria, que se convoca una vez al año, evaluó la gestión de sus cargos públicos al frente de las instituciones de la provincia, y debatió una serie de propuestas para los próximos doce meses.Los nacionalistas asumieron como un reto de futuro conseguir aglutinar en torno a una plataforma común al mayor número de asociaciones, partidos, colectivos y personas, excluida Herri Batasuna, que desde la óptica nacionalista puedan comenzar a trabajar en la normalización del País Vasco. Entre ellos estarían Eusko Alkartasuna, el sindicato ELA, el Movimiento Social por el Diálogo Elkarri, y personas que han abandonado la órbita de la coalición independentista radical, entre otras.
Se trataría, según explicó el presidente del Bizkai Buru Batzar (la Ejecutiva provincial del PNV vizcaíno), Xabier Atutxa, de crear una unidad de acción con aquellos que comparten objetivos y modelo de país. En ese sentido hizo un llamamiento para que en el plazo más breve esa iniciativa pueda ser una realidad.
"Lógicamente", aclaró Atutxa "este es un proyecto en el que no tienen cabida quienes se jactan de tener una bala para todos, o balas para todos", declaró en referencia a Herri Batasuna. "Es muy difícil que uno esté compartiendo mesa y mantel de una a tres, y que a las cuatro y media le vengan a apedrear, a insultar y agredir. Eso no es fácilmente asumible", agregó.
Ámbito vasco de decisión
La iniciativa encaja en la doctrina que emana del documento aprobado por el partido el pasado uno de febrero, en el que pedían a ETA y al Estado que iniciaran una negociación. En aquel escrito, el partido de Xabier Arzalluz apostaba por buscar una acumulación de fuerzas en lo que denominaban el ámbito vasco de decisión. "Ha llegado el mornento", declaró el parlamentario peneuvista Iñigo Urkullu, "de comenzar a buscar, desde nuestra responsabilidad y desde la base que nos proporcionan los puntos que tenemos en común, soluciones a una serie de problemas que nos afectan de forma directa".Los nacionalistas vizcaínos -precisamente los que más roces han tenido con Eusko Alkartasuna en la aplicación de los pactos de Gobierno PNVPSE-EA a nivel municipal y foral- van a mantener una serie de contactos con los colectivos y personas más próximos ideológicamente para articular la forma del foro de debates y el mejor modo de llevarlo a cabo.
Respecto a la relación con Herri Batasuna, el presidente del partido, Xabier Atutxa, desveló ayer que un miembro de la Mesa Nacional y parlamentario de la coalición independentista, que dijo hablar a título personal, pidió en diciembre la creación junto al PNV de una asamblea de cargos electos. Una propuesta que presentó formalmente HB en enero en una reunión bilateral, pero que fue rechazada.
Atutxa explicó que ya existen suficientes asambleas y foros para poder hablar, como las Juntas Generales, el Parlamento vasco, y los ayuntamientos. "Les invitamos que se sumen a ellos cuando quieran pero con la voluntad de trabajar, y de sacar adelante este país. Y desde luego contarán en ese caso con nuestra colaboración", señaló.
Sin embargo se mostó escéptico sobre esa posibilidad: "Van a tener un serio problema, adaptarse a construir y no a destruir, tendrán por delante el reto de desmilitarizar sus estructuras, y somos escépticos de que puedan controlar todo el odio que han sabido insuflar tan sutilmente a una parte de la sociedad".