Los cinco principios

Una clase convencional de yoga dura entre 60 y 90 minutos, sin importar la edad ni la capacidad física. La sesión se inicia con unos breves ejercicios de relajación, para liberar la tensión de los músculos y aliviar preocupaciones. Comienzan entonces los ejercicios de respiración yóguica, que oxigenan el cuerpo y facilitan la concentración mental. A continuación se inician las asanas o posturas.Las asanas, estirando músculos y ligamentos, mantienen flexible la columna vertebral y las articulaciones y estimulan la circulación sanguínea; además masajean los órganos internos, glándu...

Una clase convencional de yoga dura entre 60 y 90 minutos, sin importar la edad ni la capacidad física. La sesión se inicia con unos breves ejercicios de relajación, para liberar la tensión de los músculos y aliviar preocupaciones. Comienzan entonces los ejercicios de respiración yóguica, que oxigenan el cuerpo y facilitan la concentración mental. A continuación se inician las asanas o posturas.Las asanas, estirando músculos y ligamentos, mantienen flexible la columna vertebral y las articulaciones y estimulan la circulación sanguínea; además masajean los órganos internos, glándulas y nervios. Finalmente, la sesión concluye con una profunda relajación.

Normalmente, la clase se inicia y concluye con una breve oración y la repetición del mantra Om. Relajación, respiración y asanas son tres de los cinco principios, del yoga. A estos hay que añadirle la meditación y una dieta vegetariana basada en alimentos naturales en la que en la que en algunos casos están prohibidos el ajo, la cebolla o estimulantes como el tabaco, el café o el alcohol. Y es que el yoga no es una teoría, sino una práctica de vida. A diferencia de otros ejercicios físicos, que causan fatiga, su práctica da una sensación de relax y energía a la vez.