Israel quiere reanudar las negociaciones con Siria

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó ayer que su Gobierno "está interesado en reanudar las conversaciones directas de paz con Siria, donde se perciben signos en el mismo sentido". Netanyahu hizo esta afirmación en la Kneset (Parlamento) después de que 40 diputados de la oposición solicitaran su comparecencia con objeto de que explicara los planes para reanudar las negociaciones con el régimen de Hafez el Asad, suspendidas desde hace casi un año.

Según Netanyahu, la tensión de hace pocos meses entre su país y Siria "ha desaparecido, lo que no quiere decir que Israel no ...

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El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó ayer que su Gobierno "está interesado en reanudar las conversaciones directas de paz con Siria, donde se perciben signos en el mismo sentido". Netanyahu hizo esta afirmación en la Kneset (Parlamento) después de que 40 diputados de la oposición solicitaran su comparecencia con objeto de que explicara los planes para reanudar las negociaciones con el régimen de Hafez el Asad, suspendidas desde hace casi un año.

Según Netanyahu, la tensión de hace pocos meses entre su país y Siria "ha desaparecido, lo que no quiere decir que Israel no esté atenta y vigile con siete ojos lo que ocurre en la frontera, aun cuando ahora no se vean signos preocupantes". "También esperamos que existan signos alentadores", añadió. El jefe del Gobierno conservador recordó que Israel y Siria iniciaron sus conversaciones de paz en la Conferencia de Madrid de 1991, aunque hasta el momento en que se interrumpieron no habían arrojado resultados concretos."Tanto entonces como ahora, está claro que ambas partes tienen posturas diferentes", dijo Netanyahu, al señalar que su Gobierno considera que los Altos del Golán "son vitales desde el punto de vista estratégico para la seguridad del Estado de Israel". "No diré nada nuevo si recuerdo que Siria tiene posturas diferentes y contradictorias respecto a los Altos del Golán", manifestó.

Sirla exige a Israel, a cambio de la paz, la devolución íntegra de los Altos del Golán, que los israelíes conquistaron en la Guerra de los Seis Días de 1967. "Pero no es un secreto que actualmente buscamos una fórmula de compromiso entre ambas posturas divergentes, y pienso que ello es posible porque de hecho fuimos con ellas a Madrid", dijo también Netanyahu.

"También pienso que con la buena voluntad de ambas partes, y con la ayuda de Estados Unidos, lograremos alcanzar una fórmula que permita el diálogo directo entre Israel y Siria, pero no se puede imponer al presidente Hafez el Asad la reanudación de las negociaciones si no lo desea", declaró. Entretanto, el enviado especial de la Unión Europea para Oriente Próximo, el diplomático español Miguel Angel Moratinos, llegó ayer a Damasco con el objetivo de lograr la reanudación de las negociaciones entre sirios e israelíes.

En el plano interno, Netanyahu trató ayer de frenar la crisis ministerial tras el último escándalo político-judicial designando como nuevo consejero jurídico de su Gabinete a un prestigioso magistrado unánimemente respetado. El juez Yakim Rubinstein será nombrado para dicho cargo (equivalente a fiscal general) mañana en sustitución de Roni Bar-On. Rubinstein, arabista, profesor de derecho y juez del Tribunal de Jerusalén, dirigió de 1991 a 1993 las negociaciones de paz con la delegación jordano-palestina. Según la televisión estatal, el jefe del partido religioso Shaas, el ex ministro Arie Derie, impuso hace dos semanas el nombramiento de Bar-On con la esperanza de que obtendría un tratamiento deferente en un proceso de corrupción en el que está implicado.

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