Melilla es un "coladero" para inmigrantes, según dirigentes del PP
Melilla no cesa de acoger a emigrantes centroafricanos. A un ritmo de cuatro o cinco diarios, la ciudad se está viendo desbordada. Tanto es así, que dos miembros del Gobierno autónomo del Partido Popular, los viceconsejeros José Luis Poza y Abbelik Tahar, han coincidido en afirmar que la frontera con Marruecos se ha convertido en "un coladero", a pesar de las nuevas alambradas y el aumento de efectivos de la Guardia Civil.El creciente número de centroafricanos, cercano ya a los 370, ha obligado a la ciudad autónoma a trasladarlos desde su anterior albergue, el campo de fútbol municipal,...
Melilla no cesa de acoger a emigrantes centroafricanos. A un ritmo de cuatro o cinco diarios, la ciudad se está viendo desbordada. Tanto es así, que dos miembros del Gobierno autónomo del Partido Popular, los viceconsejeros José Luis Poza y Abbelik Tahar, han coincidido en afirmar que la frontera con Marruecos se ha convertido en "un coladero", a pesar de las nuevas alambradas y el aumento de efectivos de la Guardia Civil.El creciente número de centroafricanos, cercano ya a los 370, ha obligado a la ciudad autónoma a trasladarlos desde su anterior albergue, el campo de fútbol municipal, a unos viejos almacenes de la granja avícola de Melilla, pero el espacio resultante se presenta insuficiente para tantas personas.
La Asociación Pro Derechos Humanos de Melilla y la Cruz Roja han criticado el lamentable estado de estas instalaciones. Sólo seis duchas y cuatro retretes para cerca de 400 acogidos. Algunos de ellos obligados a dormir en el suelo ante la falta de camas y de espacio.
El viceconsejero de Agricultura, José Luis Poza, reconocía recientemente que los acontecimientos están desbordando las previsiones, y que la granja se ha quedado pequeña. El político popular ha pedido al Gobierno central una solución más contundente para la frontera.
La Asociación Pro Derechos Humanos de Melilla ha enviado a su vez cartas exponiendo lo que ocurre al ministro del Interior, al de Asuntos Sociales, al Defensor del Pueblo y a Amnistía Internacional, en las que se advierte igualmente sobre el riesgo de que se puedan reproducir los sucesos de junio pasado.
El día 17 de aquel mes se registraron en la ciudad graves enfrentamientos cuando inmigrantes centroafricanos que exigían legalizar su situación fueron reprimidos por la policía. Se registraron diez heridos, aunque ninguno de gravedad.