Permiso retirado
El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón denegó ayer a Mario Conde la autorización para viajar fuera de España desde hoy y hasta el próximo día 14, tras presentar un, recurso contrario la Fiscalía Anticorrupción, que está a cargo del fiscal jefe, Carlos Jiménez Villarejo. Conde solicitaba permiso para trasladarse a París.La decisión del juez suspende cautelarmente la autorización que él mismo otorgó hace pocos días a Conde para realizar el viaje hasta tanto resuelva el recurso de la Fiscalía Anticorrupción, que asumió 'la pasada semana la responsabilidad en el ...
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El juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón denegó ayer a Mario Conde la autorización para viajar fuera de España desde hoy y hasta el próximo día 14, tras presentar un, recurso contrario la Fiscalía Anticorrupción, que está a cargo del fiscal jefe, Carlos Jiménez Villarejo. Conde solicitaba permiso para trasladarse a París.La decisión del juez suspende cautelarmente la autorización que él mismo otorgó hace pocos días a Conde para realizar el viaje hasta tanto resuelva el recurso de la Fiscalía Anticorrupción, que asumió 'la pasada semana la responsabilidad en el caso Banesto. La citada Fiscalía alega que el acusado puede manipular fondos en el extranjero.
García-Castellón ya autorizó a Conde a viajar en anteriores ocasiones, aunque sólo se plantearon problemas el pasado 9 de septiembre, cuando el ex banquero se trasladó al extranjero entre los días 9 al 11 y del 20 al 27 de septiembre. La defensa del ex presidente de Banesto comunicó que éste se trasladaría a Milán y a París. Sin embargo, según informó este periódico (véase EL PAÍS, jueves 3 de octubre), Conde se trasladó a Suiza y, desde allí, regresó a Madrid.
La presencia de Conde en Suiza fue un hecho sugerente. Tres empresas de Conde y sus socios Mariano Gómez de Liaño y Francisco Javier Sitges -Kaneko Holding, Asni Investments y Jamuna- han tenido su base de operaciones en dicho país. Pero además, Conde posee fundaciones en Liechtenstein. Una de ellas, la Fundación Levis, es administrada por el bufete Batliner & Partner, de Vaduz (Liechtenstein), que administra los fondos (unos 2.000 millones de pesetas procedentes de la Ilamada operación Carburos, que canalizó los 1.344 millones desaparecidos de Banesto en abril de 1990, vía, el NMB Bank de Ginebra, primero, y el bufete del abogado Peter Schwarz de Zurich, más tarde. A su vez, Schwarz envió el dinero, por orden de Conde y Arturo Romaní, a la Fundación Levis.