El pleno de Torrejón, suspendido, por una algarada

El pleno que ayer se iba a celebrar en Torrejón (88.250 habitantes) fue suspendido por exceso de público. Casi un centenar de vecinos se quedaron en la puerta del Ayuntamiento porque el salón de plenos estaba lleno. Al tiempo, en el interior, la oposición (PSOE e IU) le gritaba al alcalde que dejase entrar a los vecinos. El regidor, Julián López, del PP, se negaba. "¡Deje entrar al pueblo!", se desgañitaba Francisco García, del PSOE. López no levantaba la vista de la mesa y sonreía. El público -casi todos seguidores de la oposición- coreaba: "¡Dictador, deja el puesto!". Ante la trifulca, ...

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El pleno que ayer se iba a celebrar en Torrejón (88.250 habitantes) fue suspendido por exceso de público. Casi un centenar de vecinos se quedaron en la puerta del Ayuntamiento porque el salón de plenos estaba lleno. Al tiempo, en el interior, la oposición (PSOE e IU) le gritaba al alcalde que dejase entrar a los vecinos. El regidor, Julián López, del PP, se negaba. "¡Deje entrar al pueblo!", se desgañitaba Francisco García, del PSOE. López no levantaba la vista de la mesa y sonreía. El público -casi todos seguidores de la oposición- coreaba: "¡Dictador, deja el puesto!". Ante la trifulca, se suspendió el pleno. Mientras, los vecinos de la calle intentaban derribar las barricadas que la policía había levantado en la entrada. Resultado, según los atacantes: varios vecinos contusionados. Y en el fondo del asunto, la negativa de López a convocar el pleno para debatir una moción de censura interpuesta en 1995. Al regidor no le es suficiente que los tribunales le obliguen a debatirla. "La sentencia no es firme", dice, "y la puedo recurrir. Hay que esperar". "¿Cuánto?", se le preguntó. "Poco". Pero no dijo el día.

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