El gasóleo ha subido hasta nueve pesetas desde su líberalización en julio

La subida continuada del precio del gasóleo está provocando la alarma entre los grandes consumidores, como transportistas y taxistas. Repsol y Cepsa han aumentado los precios medios del gasóleo de automoción en 9,24 y 6,20 pesetas desde que se produjo la liberalización de los precios y explican esta subida por el encarecimiento del gasóleo en Europa y por las nuevas exigencias de la UE sobre contenido de azufre. Pero análisis más críticos muestran que las empresas han reducido la distancia entre el precio real y el máximo hipotético, es decir, han aumentado sus márgenes desde julio.

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La subida continuada del precio del gasóleo está provocando la alarma entre los grandes consumidores, como transportistas y taxistas. Repsol y Cepsa han aumentado los precios medios del gasóleo de automoción en 9,24 y 6,20 pesetas desde que se produjo la liberalización de los precios y explican esta subida por el encarecimiento del gasóleo en Europa y por las nuevas exigencias de la UE sobre contenido de azufre. Pero análisis más críticos muestran que las empresas han reducido la distancia entre el precio real y el máximo hipotético, es decir, han aumentado sus márgenes desde julio.

La evolución reciente de los precios del gasóleo de automoción en las estaciones de servicio ha suscitado la preocupación y también las protestas ¿le los principales usuarios de este carburante, como los transportistas y los taxis. En el caso de Repsol, el precio del litro de gasóleo ha pasado de 84,4 pesetas durante la semana anterior a la liberalización (aunque el precio máximo era entonces de 89,8 pesetas) a una media durante la última semana de 93,80 pesetas -en el caso de Repsol-, con un abanico de precios que va desde 91 pesetas a 997,8, según zonas y clientes; en el caso de Cepsa, la evolución ha sido desde 87,40 pesetas a 93,60 pesetas. La mayor proporción de estas subidas corresponde al mes de septiembre. Repsol inició el mes con un precio medio de 87,40 pesetas (6,8 menos que el actual) mientras que Cepsa lo hizo desde 89,5 pesetas (4,10 pesetas menos que ahora).Las compañías petroquímicas Repsol y Cepsa, que controlan el 80% del mercado -en España se venden casi 13.500 millones de litros de gasóleo de automoción cada año-, explicaron ayer rápidamente las causas de la subida de precios al consumidor. Según las empresas, el encarecimiento del gasóleo se produce por las causas siguientes:

El precio del gasóleo está subiendo en los mercados internacionales (gráfico adjunto). El factor determinante del encarecimiento es el cambio en la especificación sobre azufre en los gasóleos que determina la Unión Europea (UE). En una directiva aprobada en 1993, la Comunidad imponía que el contenido de azufre debía reducirse hasta el 2% a fecha de 1 de octubre de 1994; y que a 1 de octubre de 1996 ese porcentaje debía reducirse al 0,05%. Las inversiones en desulfuración encarecen el producto y obligan a una reposición acelerada de stocks durante las últimas tres semanas.

El precio del petróleo también está aumentando. En el primer trimestre el precio medio del barril de brent fue de 18,62 dólares; en el segundo semestre había subido a 19,65 dólares y la semana pasada había llegado a 22 dólares para entrega inmediata.

Las empresas entienden pues que el aumento de precios para el usuario está soportado por un crecimiento de los precios que deben trasladarse al producto.

La explicación de los grupos petroquímicos, no obstante, puede ser analizada críticamente. Así, por ejemplo, se da la circunstancia de que en el momento inmediatamente anterior a la fecha de liberalización decretada el 7 de julio de este año-, las compañías estaban vendiendo el gasóleo, como media, cinco pesetas por debajo del precio máximo. En estos momentos, si se acepta la media de 93,60 pesetas por litro, la distancia se habría reducido, respecto al máximo teórico (que ya no está en vigor) a 3,80 pesetas. Pero esta media es ficticia, porque en el abanico de precios que da lugar a esa media (de 91 a 97,6 pesetas), los precios más altos se aplican en las grandes ciudades, como Madrid, y deben aplicarse sobre un volumen superior de ventas.

En cualquier caso, el precio superior del abanico (97,6 pesetas) supera en casi una peseta el precio máximo teórico. Por lo tanto, con las cifras expuestas, sería- posible poner en cuestión algunas afirmaciones de fuentes próximas a las sociedades según las cuales "no se ha producido una elevación de los márgenes".

Juan Antonio Millán, secretario general de la Federación Nacional de Asociaciones del Transporte de España (Fenadismer) afirmó ayer que solicitará a la Administración "una subvención del precio del gasóleo, ante lo que considera una subida "continuada e incontrolada" de los precios es este carburante. Millán precisó que el próximo viernes se decidirá la estrategia a seguir. Adelantó que pedirá al Gobierno que ejerza "un control sobre los oligopolios, porque entendemos que la libertad de mercado no está operando a la baja". Javier de Mauricio, secretario general de la Federación de Transportistas, declaró: "Resulta un agravio que se subvencione a sectores como el agrícola o pesquero y no a los transportistas".

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