6.000 policías impiden en Alemania a los punkis celebrar los 'días del caos'

Un ejército de 6.000 policías alemanes consiguió disuadir e impedir en Hannover la temida celebración de punkis conocida como días del caos, que en años pasados se saldé con heridos y daños considerables. Rechazados en Hannover, unos centenares de punkis se dirigieron a Bremen, 100 kilómetros al norte, y allí se dedicaron durante el fin de semana a mantener escaramuzas con la policía, que detuvo a un centenar y sufrió algún herido leve.

Al mismo tiempo, unas docenas de neonazis trataron de aprovechar la concentración policial en Hannover para reunirse y conmemorar en Bad Harzburg el pró...

Un ejército de 6.000 policías alemanes consiguió disuadir e impedir en Hannover la temida celebración de punkis conocida como días del caos, que en años pasados se saldé con heridos y daños considerables. Rechazados en Hannover, unos centenares de punkis se dirigieron a Bremen, 100 kilómetros al norte, y allí se dedicaron durante el fin de semana a mantener escaramuzas con la policía, que detuvo a un centenar y sufrió algún herido leve.

Al mismo tiempo, unas docenas de neonazis trataron de aprovechar la concentración policial en Hannover para reunirse y conmemorar en Bad Harzburg el próximo aniversario de la muerte de Rudof Hess, el lugarteniente de Hitler que se suicidé en la cárcel de Spandau el 17 de agosto, hace nueve años. La policía detuvo a 39 neonazis bajo la acusación de participar en una manifestación no autorizada.Los días del caos, que el año pasado sumieron a la capital de Baja Sajonia en el caos durante un fin de semana, quedaron reducidos este año a una demostración de fuerza policial. Tomadas todas las precauciones -prohibición judicial y despliegue de fuerza- desde varios días antes, se expulsaba de Hannover a todo aquel que llegase a la ciudad con aspecto de punki. Así, se impidió la permanencia en la ciudad a 1.300 personas de las que se sospechaba que iban en busca de camorra y con ánimo de disfrutar de un fin de semana movido. '

También habían llegado de toda Alemania 6.000 policías, incluso con helicópteros, para impedir el caos anunciado. La desigual correlación de fuerzas, media docena de policías por cada punki, impidió los enfrentamientos de años anteriores.

'Despilfarro socializador'

En 1995 los disturbios causaron en Hannover unos 70 millones de pesetas en daños, que tuvieron que afrontar los particulares y compañías de seguros. Este año no hubo nada que lamentar, pero el despliegue policial costará al contribuyente alemán unos 840 millones de pesetas. No se registran hasta el momento críticas a este despilfarro socializador en tiempos de tendencia privatizadora.Ante el cariz que tomaban las cosas en Hannover, unos 200 punkis tomaron el rumbo del norte, donde a 100 kilómetros se encuentra Bremen, con una reserva abundante de militantes de los llamados autónomos, de tendencia anarcoide. Y allí, tras intentos de cofraternización entre punkis y policías, se produjeron incidentes con lanzamiento de los llamados molis, cócteles mólotov, incendio de un coche, unos 100 detenidos y media docena de policías heridos.