Gore encuentra a Yeltsin "en muy buena forma"

El presidente ruso, Borís Yeltsin, recibió ayer en el sanatorio de Barvija, donde oficialmente se encuentra descansando, al vicepresidente norteamericano, Al Gore, después de que el día anterior hubiera cancelado inesperadamente la reunión que tenía fijada con él en el Kremlin. Gore declaró que Yeltsin estaba "en muy buena forma", pero testigos que asistieron al comienzo de la cita encontraron al presidente pálido y con dificultades de movimiento.

"Creo que está distrayéndose y teniendo un poco del descanso que necesita, pero tiene buen aspecto (...), me pareció que se encuentra en muy ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El presidente ruso, Borís Yeltsin, recibió ayer en el sanatorio de Barvija, donde oficialmente se encuentra descansando, al vicepresidente norteamericano, Al Gore, después de que el día anterior hubiera cancelado inesperadamente la reunión que tenía fijada con él en el Kremlin. Gore declaró que Yeltsin estaba "en muy buena forma", pero testigos que asistieron al comienzo de la cita encontraron al presidente pálido y con dificultades de movimiento.

"Creo que está distrayéndose y teniendo un poco del descanso que necesita, pero tiene buen aspecto (...), me pareció que se encuentra en muy buena forma", declaró Gore después de la reunión de 45 minutos que mantuvo con Yeltsin.El presidente ruso se internó por sorpresa, al parecer el pasado fin de semana, en este centro de descanso y de tratamiento médico, a unos 20 kilómetros al oeste de Moscú. El lunes, el presidente no apareció en el Kremlin para la cita que tenía con Gore, quien se encuentra en visita oficial en Rusia. El portavos del líder del Kremlin, Serguéi Medvédev, anunció a los miembros del equipo del vicepresidente y a los funcionarios de la Embajada norteamericanos que llegaron a las diez de la mañana al Kremlin que Yeltsin había pospuesto la. reunión y que a partir del lunes se encontraba de vacaciones.

Las impresiones de Gore sobre el estado de salud de Yeltsin contrastan con las de los periodistas que asistieron al comienzo de la entrevista. Así, Laurence McQuillan, corresponsal de la Casa Blanca, comentó que hay una gran diferencia entre cómo estaba Yeltsin en abril y cómo está ahora. McQuillan notó que a Yeltsin le resulta difícil caminar, que estaba pálido y que ha perdido mucho peso, testimonio que confirmaron otros reporteros.

Desaparición repentina

A pesar de lo que digan los funcionarios -rusos o extranjeros-, sólo un empeoramiento del estado de salud del presidente justifica su repentina desaparición de Moscú, sobre todo si se tiene en cuenta que la semana pasada Serguéi Medvédev había negado categóricamente que el presidente pensara tomar vacaciones antes del 9 de agosto, día previsto para la toma de posesión por un segundo mandato. A Yeltsin no se le ve en actos públicos desde el 26 de junio, día en que, según fuentes cercanas al Kremlin, sufrió su primera crisis cardiaca de este año, seguida de una segunda al día siguiente.Según esas fuentes, los médicos recomendaron a Yeltsin un completo reposo durante dos meses. Todo parece confirmar que es lo que está haciendo y que reaparecerá sólo para la toma de posesión para continuar después con sus vacaciones.

El vicepresidente Gore no Sólo fue optimista con respecto a la salud de Yeltsin, sino también sobre las posibilidades de paz en Chechenia. "Creo que hay una clara posibilidad de que en los próximos dos o tres días veamos una nueva dirección en la política aplicada allí", dijo y agregó que "es posible" que ese cambio incluya un alto el fuego y una retirada parcial de las tropas rusas de esa república norcaucásica.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Sin cambios

Sin embargo, la realidad, al menos por el momento, no muestra ningún signo de cambio. El ministro del Interior, Anatoli Xulikov, declaró que es temprano aun para retirar las tropas y acusó a los independentistas de haber planeado las explosiones que la semana pasada en dos trolebuses en Moscú, lo que le sirvió de pretexto para justificar la actual ofensiva.Tanto ésta como la no retirada de los soldados rusos violan los acuerdos firmados en Nazrán antes de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.Los rusos continuaron ayer machacando las aldeas del sur de Chechenia y helicópteros dispararon misiles teledirigidos contra la casa de la madre del líder independentista, Zelimján Yandarbíev, en la localidad de Stárie Ataguí.

Archivado En