Çiller y los islamistas no llegan a un acuerdo para formar Gobierno en Turquía
El líder islamista, Necmetin Erbakan, y la ex primera ministra Tansu Çiller no lograron ayer ponerse de acuerdo para formar un gobierno de coalición en Turquía tras varias horas de reunión. Aunque la máxima dirigente del Partido de la Recta Vía (DYP, conservador) anunciará una decisión definitiva al respecto el próximo martes, adelantó ayer mismo en conferencia de prensa que sus preferencias apuntan ahora hacia la creación de una amplia coalición que excluya a los islamistas y que esté integrada por los dos partidos conservadores y los dos de centro-izquierda.Poco antes, cuatro diputados anunc...
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El líder islamista, Necmetin Erbakan, y la ex primera ministra Tansu Çiller no lograron ayer ponerse de acuerdo para formar un gobierno de coalición en Turquía tras varias horas de reunión. Aunque la máxima dirigente del Partido de la Recta Vía (DYP, conservador) anunciará una decisión definitiva al respecto el próximo martes, adelantó ayer mismo en conferencia de prensa que sus preferencias apuntan ahora hacia la creación de una amplia coalición que excluya a los islamistas y que esté integrada por los dos partidos conservadores y los dos de centro-izquierda.Poco antes, cuatro diputados anunciaron que abandonaban las filas del grupo de Çiller para pasarse al también conservador Partido de la Madre Patria, de Mesut Yilmaz, en protesta por los "coqueteos" de la ex primera ministra con los islamistas.
La fuga de los cuatro parlamentarios supone una doble bofetada para Tansu Çiller: su partido pierde la condición de segunda fuerza política en el Parlamento turco y la cede al grupo de Yilmaz, su eterno rival, que será a partir de ahora esa segunda fuerza tras los islamistas del Partido del Bienestar, de Necinetin Erbakan, con los que Çiller planea pactar.
Los cuatro de ayer no son los primeros parlamentarios que abandonan a Çiller. En las últimas dos semanas otros dos parlamentarios ya dejaron el Partido de la Recta Vía, y los cuatro de ayer adelantaron que bastantes otros les seguirán los próximos días.
Uno de ellos, además, puntualizó que su salida no sólo responde a las pretensiones de Çiller de formar Gobierno con los islamistas, sino a su convicción de que la ex primera ministra ha olvidado sus pasadas críticas a los partidos confesionales y se ha decidido por el pacto con Erbakan para ahogar cualquier intento de investigar las sospechas de corrupción que pesan sobre ella. La alianza, dijo, llevaría a "un Gobierno para lavar dinero". Añadió que el objetivo de los tránsfugas es forzar a una alianza que lleve a la fusión entre el Partido de la Recta Vía y el Partido de la Madre Patria.
El goteo de tránsfugas, además, recorta la mayoría que aglutinaría un eventual acuerdo entre Çiller y Erbakan. Ahora, entre ambos, superarían la mayoría simple por sólo 10 votos: 158 de los islamistas y 127 de Çiller.
En las filas islamistas también se han levantado voces contra el pacto. El diario islámico Yeni Safat calificó ayer de "amarga alianza" el posible acuerdo para una coalición de Gobierno.