La dimisión de Soler pone en peligro la mayoría del PP en Baleares

Tres diputados del PP en el Parlamento balear están dispuestos a hacer valer en futuros debates y votaciones su independencia personal para interpretar con fidelidad los principios del programa popular, de centro derecha liberal y autonomista, aplicados por el derrocado presidente balear Cristófol Soler. Con esta actitud, los tres diputados pueden hacer peligrar la mayoría conservadora en la cámara (31 diputados contra 28 de la oposición)

Los tres diputados son Joana Aina Vidal, de Mallorca; Joan Marí, de Ibiza; y Avelí Casanovas, de Menorca. Los tres han reiterado su disconformidad con...

Tres diputados del PP en el Parlamento balear están dispuestos a hacer valer en futuros debates y votaciones su independencia personal para interpretar con fidelidad los principios del programa popular, de centro derecha liberal y autonomista, aplicados por el derrocado presidente balear Cristófol Soler. Con esta actitud, los tres diputados pueden hacer peligrar la mayoría conservadora en la cámara (31 diputados contra 28 de la oposición)

Los tres diputados son Joana Aina Vidal, de Mallorca; Joan Marí, de Ibiza; y Avelí Casanovas, de Menorca. Los tres han reiterado su disconformidad con la forma poco transparente y democrática según su criterio, con la que el ex presidente Gabriel Cañellas desencandenó la destitución de Soler. El pasado martes, el día de la censura interna a Soler, veinte diputados del PP votaron su salida de la presidencia, cuatro se abstuvieron y otros cuatro votaron en contra. Soler no acudió al debate y dos diputados estaban de viaje.Los tres críticos -a los que se podrían sumar el propio Soler y otros dos diputados adictos- están ofendidos política y personalmente por la maniobra de Cañellas. Al emitir su voto reclamarán congruencia con el proyecto autonómico regional del PP -que fue elaborado por Soler para la última campaña electoral-. Los diputados exigen principios éticos, la reflexión y debate interno y la coherencia política de la acción gubernamental. Ninguno de los discrepantes pretende una fractura con el PP.

Vidal reconoció que, tras la elección de Jaurrie-Matas como presidente, romperá la disciplina del grupo popular cada vez que las propuestas estén alejadas de sus, convicciones -éticas y democráticas. Marí no aseguró siquiera su voto favorable a Matas: "mi voto no se compra ni se vende". Casanovas exigirá explicaciones previas antes de decidir si apoya la investidura. Vidal y Marí fueron, consejeros por un día del non nato Gobierno Soler, cuya composición desencadenó el golpe de Cañellas.

Joan Huguet, presidente del PP, afirma que Jaume Matas tendrá los 31 votos del grupo. Hoy, Verger, Huguet y el presidenciable Matas esperan ser recibidos en Madrid por un representante de la cúpula nacional.