Tribuna:

Detallazo

Entre tanto malevaje como nos rodea, llegan peores noticias de exterior, a través de organizaciones humanitarias como Manos Unidas y Amnistía Internacional. Se refieren a México. MU informa que el Frente Cívico Luis Donaldo Colosio, popularmente conocido como Los Chinchulines, que participó en las últimas elecciones bajo el PRI, el partido gobernante, no ha dejado de ejercer la violencia en la zona de Chilón desde que llegó al Ayuntamiento, incendiando edificios y matando gente, ante la pasividad culpable de la policía.Más. Amnistía Internacional denuncia las violaciones de los derechos...

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Entre tanto malevaje como nos rodea, llegan peores noticias de exterior, a través de organizaciones humanitarias como Manos Unidas y Amnistía Internacional. Se refieren a México. MU informa que el Frente Cívico Luis Donaldo Colosio, popularmente conocido como Los Chinchulines, que participó en las últimas elecciones bajo el PRI, el partido gobernante, no ha dejado de ejercer la violencia en la zona de Chilón desde que llegó al Ayuntamiento, incendiando edificios y matando gente, ante la pasividad culpable de la policía.Más. Amnistía Internacional denuncia las violaciones de los derechos humanos contra la mujer, dentro de la violación general de los ídems a que son sometidos los indígenas. Aquella cosa que se firmó en la Conferencia de Pekín, y que parecía tan obvia -pero son tiempos éstos en los que hay que pelear por lo evidente-, de que "los derechos de la mujer son derechos humanos" no resulta del gusto del Gobierno mexicano, a lo que se ve. Al da cuenta, con detalle, de una serie de casos, entre ellos los de tres hermanas indígenas tzeltal violadas y torturadas por miembros del Ejército mexicano en Chiapas, y el de una niña nahuatl de 14 años, violada por miembros de la Policía Municipal de Cuetzalan, Estado de Puebla.

Apenas hay diferencia entre los sufrimientos, pero en la tragedia de la niña nahuatl hay un dato escalofriante: sus verdugos, tres policías y el comandante, tuvieron la delicadeza de no dejarla embarazada. Mientras se la sujetaban sus subordinados, el comandante le tranquilizó diciéndole que se pondrían un condón. Se les debió de olvidar, con el apretón, y la obligaron a tomarse la medicina, descrita en la querella oficial recibida por Al como la píldora anticonceptiva levornorgestrel-etini-lestradiol, es decir, del día después. Toma detallazo.

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