Preámbulo popular y articulado de CiU
El pacto entre el PP y CiU parece escrito con dos plumas: una que moja en el programa popular y otra, en el de los nacionalistas catalanes.La primera ha redactado casi en su totalidad el preámbulo del documento, su parte más literaria, mientras que la segunda se ha aplicado al articulado, al aspecto normativo.
El texto contiene expresiones de origen inequívocamente popular, como la Administración única, acuñada por Manuel Fraga, pero deduce de ella consecuencias que no imaginaron sus creadores, corno la supresión de los gobernadores civiles y su sustitución por subdelegados provi...
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El pacto entre el PP y CiU parece escrito con dos plumas: una que moja en el programa popular y otra, en el de los nacionalistas catalanes.La primera ha redactado casi en su totalidad el preámbulo del documento, su parte más literaria, mientras que la segunda se ha aplicado al articulado, al aspecto normativo.
El texto contiene expresiones de origen inequívocamente popular, como la Administración única, acuñada por Manuel Fraga, pero deduce de ella consecuencias que no imaginaron sus creadores, corno la supresión de los gobernadores civiles y su sustitución por subdelegados provinciales elegidos entre los funcionarios.
En otros casos, como el denominado Pacto de Austeridad entre las Administraciones Públicas, la inclusión en el texto del término propuesto por el PP no entraña aparentemente compromiso alguno.
La "profesionalización progresiva" del servicio militar, contenida en. el programa del PP, es llevada en el pacto con CiU al límite, "hasta completar un modelo de fuerzas armadas totalmente profesional" y, en consecuencia, la supresión de la mili en el año 2001. Nada se dice de la reducción de la mil¡ a seis meses que prometió el PP.
La reforma de la Ley del Suelo, pactada con CiU, no supone problema para el PP, que proponía "reformar el régimen legal del suelo". No pasa igual con la Ley de Costas, que el programa popular prometía "aplicar estrictamente", al menos en cuanto a vertidos.
El programa del PP proponía potenciar la participación de las comunidades autónomas en la política europea, a través del Comité de las Regiones, pero el acuerdo, en cambio, prevé la presencia de representantes autonómicos en la delegación española cuando se negocien temas de su interés.
Otros aspectos, como la reducción del IVA del peaje de las autopistas, ni siquiera entraban en las preocupaciones de los redactores del programa del Partido Popular.