Tribuna:CORREO ELECTRÓNICO

La era de las fusiones

El autor cree que, en el futuro, un único cable que llegará a casa o la oficina proporcionará los servicios de teléfono, televisión por cable, videófono, Internet y televisión.

Pregunta. ¿Cree que habrá una fusión de la televisión y los ordenadores? ¿Es posible que las velocidades de las comunicaciones se vuelvan tan rápidas que la distinción entre televisión por cable y los servicios informatizados acabe siendo cada vez menor? Lee Bowron, Nashville.Respuesta. La distinción entre las redes de comunicaciones desaparecerá. Un único cable que llegará a su casa o su oficina proporcionará los servicios de teléfono, televisión por cable, videófono, Internet y televisión. Las conexiones las ofrecerán las empresas de teléfono, televisión por cable y, posiblemente, incluso la...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Pregunta. ¿Cree que habrá una fusión de la televisión y los ordenadores? ¿Es posible que las velocidades de las comunicaciones se vuelvan tan rápidas que la distinción entre televisión por cable y los servicios informatizados acabe siendo cada vez menor? Lee Bowron, Nashville.Respuesta. La distinción entre las redes de comunicaciones desaparecerá. Un único cable que llegará a su casa o su oficina proporcionará los servicios de teléfono, televisión por cable, videófono, Internet y televisión. Las conexiones las ofrecerán las empresas de teléfono, televisión por cable y, posiblemente, incluso las empresas de servicios públicos. Los fabricantes empiezan a experimentar con híbridos de televisiones y ordenadores y la tecnológia básica de los aparatos empezará a fusionarse. Pero la forma y la función de aparatos como los televisores, los ordenadores y los teléfonos tenderá a ser distinta porque utilizamos las herramientas de forma diferente.

Hace unos años, algunas personas especularon con la posibilidad de que el televisor sería el primer aparato que la gente utilizaría para interactuar con información en la autopista de la información del futuro. El nacimiento de Internet ha demostrado que los ordenadores personales serán los que desempeñen esta función en su lugar. Para empezar, las pantallas de televisión no pueden mostrar claramente un texto pequeño. Y los teclados seguirán siendo importantes incluso cuando los ordenadores reconozcan perfectamente la palabra hablada y escrita a mano.

Pero el PC no será la única forma de recorrer la Internet. Los televisores se conectarán a la red a través del uso de decodificadores, que son básicamente ordenadores sin pantalla. El PC de bolsillo que predije en una columna anterior, extraerá información de la red interactiva. Los teléfonos de nueva generación también se conectarán.

También se desarrollará una variedad de nuevos aparatos, aunque una de las lecciones del sector de los PC es que no todos los aparatos de información que alguien se saque de la manga tendrán éxito. Hace varios años, se tenía la idea descaminada de que las empresas favorecerían las llamadas terminales mudas frente a los PC. La idea era suministrar datos desde distribuidores instalados en el centro de redes comerciales de alta velocidad hasta terminales sin disco de menor capacidad que un ordenador personal.

La estrategia privaba a los trabajadores de la potencia y la flexibilidad de utilizar un verdadero PC y fracasó. Actualmente, estas I.lamadas terminales X- Windows abarcan menos de un 1 %del mercado. Ahora, algunas de las mismas empresas que promovieron las terminales mudas para redes comerciales han reaparecido para proponer un complemento de la Internet. Es la llamada terminal Internet u ordenador de la red -una terminal de menor potencia y sin disco que extraería información únicamente de la Internet e impediría a sus usuarios utilizar las principales aplicaciones del PC-. Su ventaja es que podría costar un poco menos que un PC con toda su capacidad.

Esta idea no me impresiona lo más mínimo. En primer lugar, a medida que avanza la tecnología de la Intenet, los consumidores que quieren aprovecharla van a querer más potencia en lugar de menos. En segundo lugar, la gente ya puede comprar ordenadores baratos e incluso usados que pueden desempeñar el papel de la terminal.

Llama la atención el que la opinión pública haya rechazado insistentemente ordenadores personales que eran relativamente baratos pero con poca potencia. Los establecimientos prácticamente han renunciado ya a intentar vender ordenadores personales de 800 dólares (unas 100.000 pesetas) aunque, hace unos años, había máquinas similares que eran artículos muy solicitados cuando costaban mucho más. Ahora nadie los compra porque los consumidores quieren máquinas con perspectivas de futuro.

Esta resistencia a conformarse con una experiencia de segunda fila es una de las razones por las que estoy convencido de que las terminales no conquistarán un gran mercado. Incluso los consumidores que más miran su bolsillo rechazarán las terminales en favor de ordenadores personales o televisores más antiguos conectados a través de decodificadores.

Entre los digerati, la,cuestión de qué hardware y qué software serán los más utilizados en la era de la Internet es especialmente candente ahora, porque influye en la clase de experiencia que proporcionará la Internet. He tratado el tema más ampliamente de lo que permite esta columna en un ensayo que aparecerá (en varios idiomas) en la Internet en hptt://www.microsoft.com/.

Entretanto, voy a tratar a continuación un asunto que tiene que ver con esto

P. Si los televisores y los PC se fusionan, ¿qué fabricante cree que tendrá ventaja, el fabricante de televisores o el fabricante de ordenadores? Naorni Seko, Yokohama, Japón.

R. Tradicionalmente, las empresas de electrónica de consumono, han participado mucho en el sector de los ordenadores personales. Toshiba ha sido una excepción y otras empresas de electrónica de consumo también han tenido éxito, especialmente con, monitores e impresoras. Pero en general, estas empresas de consumo no han tenido un papel protagonista en este sentido.

El panorama está cambiando. El año pasado, el mercado doméstico nipón de ordenadores personales estalló. Algunas empresas de hardware no japonesas como Apple vieron que su negocio se venía abajo en ese país cuando los competidores nacionales empezaron a pisar fuerte. Paralelamente, las empresas japonesas de electrónica de consumo han aumentado sus exportaciones de hardware informático. NEC fabrica ordenadores personales, Sony tiene previsto fabricarlos y Mitsubishi venderá televisores de gran pantalla que permitirán a la gente navegar por la Internet. En Europa, Thompson Consumer Electronics también se mueve en esa dirección.

Las empresas de electrónica de consumo tienen grandes habilidades: mercadotecnia, fabricación y distribución. Espero que algunas hagan grandes contribuciones al mercado mundial de ordenadores personales incluso antes de que la tecnología de los televisores y los ordenadores empiece a converger. La perspectiva de esta competencia cada vez mayor es una de las razones por las que los fabricantes de ordenadores intentan abarcar una producción más eficaz y de mayor volumen. Entretanto, preparan sus productos destinados al mercado de la electrónica de consumo.

Podría acabar en una verdadera batalla. En ese caso, los principales ganadores serían los consumidores que cosecharían los beneficios de una innovación rápida y unos precios bajos.

P. Los libros infantiles son la tecnología educativa crucial de la actualidad. Son manejables, baratos, fáciles de usar y, a veces, incluso adorables. Los niños conectan estupendamente con los libros. ¿Puede hacer algo parecido la alta tecnología? James H. Wendorf.

R. Los libros son geniales. Hasta los puedes meter en la cuna. Los niños los pueden llevar en el autobús o en el avión. Soy un gran admirador de toda clase de libros y seguirán siendo muy importantes. El software informático tiene un papel educativo cada vez más destacado y sustituirá a los libros en algunos contextos. Por ejemplo, es difícil discutir la velocidad y la profundidad crecientes de las obras de referencia electrónica, entre ellas algunos recursos disponibles a través del ordenador.

Los niños más pequeños pueden entretenerse mucho con un buen software que les permita hacer descubrimientos o que les sorprenda con audio o vídeo. Los niños pueden coleccionar software de la misma manera que coleccionan libros. Afortunadamente, los libros y el software pueden funcionar en colaboración. Hay libros complementarios de muchos de los mejores títulos de software infantiles. Con el libro, no hay que tener el ordenador encendido, ni siquiera hay que tener ordenador. Por supuesto, mis hijos tendrán ordenadores. Pero primero tendrán libros.

La televisión y el ordenador personal se fusionarán en la era Internet

Bill Gates es presidente de Microsoft.

Archivado En