"Nunca me van a oír preguntar cuánto cuestan los votos"

Los algo más de 340.000 votos que separan al PSOE del PP obligan a Felipe González a comportarse como hombre de Estado. Ayer se comprometió a respetar un hipotético apoyo de los nacionalismos catalán y vasco al Gobierno que forme José María Aznar., "Nunca me van a oír preguntar cuánto cuestan los votos", dijo González, en recuerdo del martilleo constante que ha tenido que soportar durante la última legislatura por el respaldo de CiU a su Gobierno.Pero González no quiso meterse por el camino de la amargura. En seguida cambió el tercio. "Estoy satisfecho y quiero que quede claro. Nunca un triunf...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los algo más de 340.000 votos que separan al PSOE del PP obligan a Felipe González a comportarse como hombre de Estado. Ayer se comprometió a respetar un hipotético apoyo de los nacionalismos catalán y vasco al Gobierno que forme José María Aznar., "Nunca me van a oír preguntar cuánto cuestan los votos", dijo González, en recuerdo del martilleo constante que ha tenido que soportar durante la última legislatura por el respaldo de CiU a su Gobierno.Pero González no quiso meterse por el camino de la amargura. En seguida cambió el tercio. "Estoy satisfecho y quiero que quede claro. Nunca un triunfo ha sido tan amargo ni una derrota tan dulce", dijo parafraseando a Alfonso Guerra y con una sonrisa de lado a lado.

Más información

González fue más lejos en lo que fue un homenaje a los nacionalismos catalán y vas co. En lo que también se podía interpretar como un con sejo a su sucesor en La Moncloa, dijo que el comportamiento de PNV y CiU ha sido de "una gran corrección" desde la responsabilidad del Estado en su ayuda al Gobierno central. Citó, incluso, el comportamiento de los nacionalistas ante el déficit público y, admitió que había sido más correcto en su actitud ante el Gobierno central que ante su propia comunidad, donde los eje cutivos nacionalistas están fuertemente endeudados. No sólo se comprometió a no azuzar el enfrentamiento interterritorial, sino que hizo un gran homenaje a Cataluña, "a su cultura y. a su capacidad de crear riqueza . Fue una tarde de homenajes. Expresó su "inmensa gratitud" a los electores, a los sindicalistas, y a los intelectuales y artistas que han dado la cara por el PSOE "en un momento tan difícil".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En