El hermano de Emilio Muñoz no colaboró con la policía por dinero

Desde su domicilio en el pueblo de Sigüenza (Guadalajara), Alfonso Muñoz, hermano de Emilio Muñoz, detenido junto a su esposa, Felisa García Campuzano, y Cándido Ortiz por el secuestro y asesinato de la joven madrileña Anabel Segura, aseguró ayer en declaraciones a la cadena SER que su colaboración con la policía fue totalmente desinteresada."Se ha dicho que yo lo había denunciado [a Emilio Muñoz] para cobrar la recompensa. Eso es totalmente falso, es mentira, y se lo puede preguntar a la policía, a la familia de la chica o a quien quiera. Tienen que comprobar esas cosas", dijo en conversación...

Desde su domicilio en el pueblo de Sigüenza (Guadalajara), Alfonso Muñoz, hermano de Emilio Muñoz, detenido junto a su esposa, Felisa García Campuzano, y Cándido Ortiz por el secuestro y asesinato de la joven madrileña Anabel Segura, aseguró ayer en declaraciones a la cadena SER que su colaboración con la policía fue totalmente desinteresada."Se ha dicho que yo lo había denunciado [a Emilio Muñoz] para cobrar la recompensa. Eso es totalmente falso, es mentira, y se lo puede preguntar a la policía, a la familia de la chica o a quien quiera. Tienen que comprobar esas cosas", dijo en conversación telefónica.

El hermano del presunto asesino pidió en antena a los medios de comunicación y a la opinión pública que dejen de presionar a su familia: "Yo con la gente que me rodea no tengo ningún problema; con la policía, tampoco. Cuanto antes se olvide esta historia, [en la] que yo no tengo nada que ver, mejor. La culpa no la tiene toda la familia de este... de este cabrón. Es que no tengo palabras, no tiene perdón de Dios".

Alfonso Muñoz tiró de la lengua a su cuñada Felisa García Campuzano en una conversación telefónica que fue intervenida por la policía. En la charla, la mujer confesó que su marido había matado, a Anabel Segura el mismo día en que la secuestró, el 12 de abril de 1993.

Ayer, Muñoz confesó a la SER estar vencido por el escándalo. "Estoy dolido como no se lo imaginan.. Todos los días tengo que ir a trabajar... porque si ocurre en Madrid, la gente ni te conoce, pero aquí, en un pueblo, todos vivimos con todos".

Las declaraciones radiofónicas de Alfonso Muñoz se referían a la conversación telefónica que sostuvo el día 27 de septiembre con su cuñada Felisa y que fue vital para la detención de Emilio Muñoz. En el diálogo, la mujer le contó que fue ella la que simuló la voz de Anabel Segura en una cinta que enviaron al domicilio de la familia en La Moraleja (Alcobendas) para que la familia pagara el rescate.

Felisa. "Tu hermano me obligó a mí a grabar la cinta ( ... ) A mí, tu hermano es que me obligó a grabar la cinta, ¿me entiendes? Porque yo... Tu hermano a mí ni siquiera me dijo nada, y yo se lo saqué todo; vamos, que lo adiviné".

A lo largo de su conversación, en la que Alfonso dijo haber gastado 2.000 pesetas, los dos cuñados intentaron exculparse sobre su supuesta complicidad y acusaron a Emilio Muñoz.

Alfonso: "Yo, yo, vamos, yo es que no sé nada, es lo que te quiero decir, y por eso te pregunto, para estar tranquilo, es que menudo berenjenal, macho.

La policía y la familia de Anabel Segura ofrecieron 60 millones de pesetas como recompensa. Un vecino de la localidad de Escalona reconoció en el mensaje de uno de los secuestradores, difundido a través del programa de televisión Quién sabe dónde, la voz de su fontanero, Cándido Ortiz.