El PSOE se pregunta si la presión de la "trama contra el Gobierno y el Estado" ha llegado al Poder Judicial

El Gobierno y el PSOE se acogieron ayer a la fórmula del interrogante y el misterio para preguntarse si el Poder Judicial "ha resistido como el Gobierno" las presiones de lo que el PSOE y el Gobierno llaman conspiración o pulso contra el poder ejecutivo y el Estado. Los socialistas aseguran que irá desvelándose la identidad de quienes han colaborado en la trama. "¿Ha llegado la presión al Poder Judicial? ¿A otros sectores? ¿De parte de quién está José María Aznar?". Estas preguntas salieron ayer de la reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE en voz de su secretario de organización, Ciprià Cisc...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Gobierno y el PSOE se acogieron ayer a la fórmula del interrogante y el misterio para preguntarse si el Poder Judicial "ha resistido como el Gobierno" las presiones de lo que el PSOE y el Gobierno llaman conspiración o pulso contra el poder ejecutivo y el Estado. Los socialistas aseguran que irá desvelándose la identidad de quienes han colaborado en la trama. "¿Ha llegado la presión al Poder Judicial? ¿A otros sectores? ¿De parte de quién está José María Aznar?". Estas preguntas salieron ayer de la reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE en voz de su secretario de organización, Ciprià Ciscar.

Más información

Desde el Gobierno, el ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, preveía para pronto más datos sobre la supuesta trama.El Gobierno y el PSOE no están del todo satisfechos de cómo fue el debate del día anterior en el Congreso, ya que lo que ha trascendido mayoritariamente ha sido la decisión de la oposición de abandonar el hemiciclo. Aún así, "quedará para la historia", bromeaba un dirigente socialista, todo lo que dijo el ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, sobre las conversaciones de Jesús Santaella, abogado de Mario Conde y del coronel Juan Alberto Perote, con Felipe González y las posteriores "presiones" efectuadas por éste a otros miembros del Gobierno.

Asmismo, se recordará, dicen en tono optimista, las claves que dio el presidente del Grupo Socialista, Joaquín Almunia, en su exposición sobre lo que, a su juicio, va componiendo la trama.

De momento, en la Ejecutiva Federal del PSOE, reunida ayer con Felipe González durante casi tres horas, se llegó al acuerdo de hacer llegar a la opinión pública la seguridad de que pronto habrá más datos sobre el asunto. Eso sí, tanto Pérez Rubalcaba como Ciscar, uno por la mañana y otro por la noche, insistieron en que el Gobierno "no ha cedido ni va a ceder" a las presiones, por lo que desaniman a quienes quieran intentarlo de nuevo.

Preguntas

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Pero pulso, según Ciscar, ha habido. El secretario de organización del PSOE se preguntó si todos los presionados han resistido del mismo modo que ha hecho el Gobierno. "¿Lo han resistido otros? ¿Ha podido llegar el pulso a alguna instancia judicial? ¿A algunos medios de comunicación? ¿A algunos otros sectores? ¿De parte de quién está José María Aznar?", planteó Ciscar en unas declaraciones a este periódico para precisar unas palabras suyas pronunciadas en conferencia de prensa tras la reunión de la ejecutiva en la que, en un primer momento, se interpretó que Ciscar lo que se preguntaba era si alguna instancia judicial no formaría parte de la trama. El dirigente socialista aseguró que lo que quiso dejar sobre la mesa era la pregunta de si estas instancias se habían mostrado tan impermeables a las presiones como el Gobierno.Las preguntas de Ciscar no tuvieron respuesta y pidió paciencia: "Todo esto irá desvelándose, y los ciudadanos comprobarán que ha habido trama política y pulso contra el Gobierno y las instituciones y que no ha habido resultados".

Los socialistas se muestran cada vez más dispuestos; no a ofrecer pruebas concretas de momento, pero sí a subir el tono de sus acusaciones. Con todas sus letras, Ciscar afirmó que el Gobierno ha sufrido presiones por parte de personas implicadas en procesos penales, con la pretensión de elevar hacia arriba la responsabilidad y que todo quedara en nada. "Un banquero desposeído por su gestión [Mario Conde]; un militar que no ha cumplido con su deber [Juan Alberto Perote], y un político que ha fracasado como tal, que fue expulsado del PSOE y que luego se acercó al PP [Ricardo García Damborenea]".

Según Ciscar, estas son las personas que de una u otra manera protagonizan la trama, aunque no son los únicos. Después, el secretario de organización del PSOE pasó a preguntar a Aznar algunas cosas: "¿Qué entiende por responsabilidad política cuando le afecta a él? ¿Qué conversaciones ha tenido con García Damborenea? Y, por último, ¿de parte de quién está?".

March y la República

Ayer fue el día en el que los socialistas se pusieron de acuerdo para formular preguntas a Aznar. El ministro de Trabajo, José Antonio Griñán, el titular para las Administraciones Públicas, Joan Lerma, y el ministro portavoz, Pérez Rubalcaba, pidieron a Aznar explicaciones de por qué de las 45 preguntas que Felipe González ha respondido en el Congreso en la sesión de control de los miércoles, nunca ha tenido a bien hacerle "una sola".Parece muy claro que, al menos desde el partido, los socialistas empiezan ya su campaña de lo que llaman "defensa de la política", frente a sectores que no se presentan a las elecciones. "O los defensores de la autonomía de la política terminamos con quienes quieren ser poderes fácticos, o éstos acaban con la autonomía de la política", dijo Ciscar recomendando a José María Aznar que tome nota de lo que está sucediendo, no fuera a ser que su, "colaboración" se traduzca en que en el futuro "no tenga libertad de acción".

Miembros de la ejecutiva insisten en encontrar paralelismos históricos con la situación actual y recordaban una frase que corrió por la España de los años treinta. "O la República acaba con Juan March, o éste acaba con la República".

Archivado En