EL PSE debate su estrategia contra ETA ante la nueva fase del pacto de Ajuria Enea

Los socialistas vascos debatieron ayer la estrategia que seguir el PSE-EE en materia de pacificación, en la nueva fase que se abre en el País Vasco. Este escenario vendrá determinado por las iniciativas en favor del diálogo y por la nueva estrategia que se vislumbra para el Pacto de Ajuria Enea. Las diferentes posiciones que afloraron en el PSE-EE tras la aprobación por su grupo municipal en San Sebastián de una moción en la que se cuestiona el cuartel de Intxaurrondo han agitado el debate sobre el modelo de pacificación.

El secretario general del PSE-EE, Ramón Jáuregi presentó en l...

Los socialistas vascos debatieron ayer la estrategia que seguir el PSE-EE en materia de pacificación, en la nueva fase que se abre en el País Vasco. Este escenario vendrá determinado por las iniciativas en favor del diálogo y por la nueva estrategia que se vislumbra para el Pacto de Ajuria Enea. Las diferentes posiciones que afloraron en el PSE-EE tras la aprobación por su grupo municipal en San Sebastián de una moción en la que se cuestiona el cuartel de Intxaurrondo han agitado el debate sobre el modelo de pacificación.

El secretario general del PSE-EE, Ramón Jáuregi presentó en la reunión que celebró ayer en Bilbao la ejecutiva socialista un documento base para la discusión. Jáuregui tiene previsto dar cuenta hoy en Bilbao de las conclusiones antes de acudir a Vitoria al Consejo de Gobiemo.En el debate, asomaron de las diferentes posturas. El nuevo perfil dibujado por los socialistas guipuzcoanos, que dirige Jesús Eguiguren, muestra una estrategia más acorde con las iniciativas nacionalistas han ido aflorando desde que se celebró la I Conferencia de Paz de Elkarri, en marzo pasado. Eguiguren cree que el Pacto de Ajuria Enea ya ha cumplido su papel y que, en la nueva fase, habría que utilizar como paraguas el acuerdo de un Ejecutivo tripartito -en donde el PSE comparte tareas de gobierno con el PNV y EA- y buscar salidas desde ahí.

En el texto del acuerdo de gobierno suscrito entre las tres fuerzas se mencionaba la posibilidad de adoptar acuerdos por mayorías cualificadas en vez de por unanimidad en la Mesa de Ajuria Enea con el fin de evitar posibles acciones obstruccionístas. Esta novedad fue criticada por el PP, que considera que puede ser la primera piedra en una nueva estrategia de pacificación para arrinconar el pacto antiterrorista y potenciar otros foros, como el Gobierno tripartito o el propio Parlamento.

Los socialistas vizcaínos, con Nicolás Redondo Terreros al frente, estiman que la defensa de la Mesa de Ajuria Enea es compatible con una acción común de los tres partidos del Gobierno Vasco en relación con el terrorismo.

Frente a esta postura mucho más conciliadora con la visión de Eguiguren, se alzan las voces de los socialistas alaveses, que criticaron con dureza la moción aprobada en el Ayuntamiento de San Sebastián. El PSE-EE donostiarra suscribió un texto en el que se aseguraba que Intxaurrondo "está bajo sospecha" y se pedía a la Junta de Seguridad del País Vasco que estudiase la viabilidad del cierre de este cuartel dé la Guardia Civil. Los socialistas de Álava consideran que fuera del consenso del Pacto no hay nada que hacer.