El nuevo edil de Salamanca amonesta a cuatro terrazas de la Castellana

El concejal del distrito de Salamanca, Femando Martínez Vidal, presentó la noche del martes sus credenciales en cuatro terrazas del paseo de la Castellana. El edil amenazó con el cierre de los locales si no respetan la ordenanza municipal sobre terrazas y veladores. Para empezar, la instalación de Boccaccio ha quedado borrada de la costa, aunque anoche se desconocía el motivo de su desmantelamiento.

Las cuatro terrazas visitadas por el concejal fueron Castellana 8, Embassy, Archy y Tábata. Según ha confirmado el Ayuntamiento, todas ellas han cometido alguna infracción grave. Cast...

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El concejal del distrito de Salamanca, Femando Martínez Vidal, presentó la noche del martes sus credenciales en cuatro terrazas del paseo de la Castellana. El edil amenazó con el cierre de los locales si no respetan la ordenanza municipal sobre terrazas y veladores. Para empezar, la instalación de Boccaccio ha quedado borrada de la costa, aunque anoche se desconocía el motivo de su desmantelamiento.

Las cuatro terrazas visitadas por el concejal fueron Castellana 8, Embassy, Archy y Tábata. Según ha confirmado el Ayuntamiento, todas ellas han cometido alguna infracción grave. Castellana 8 cortó la música después de la hora permitida-las doce de la noche-. Carlos Mendoza, de 31 años, encargado de la terraza, ironizaba ayer: "A partir de ahora vamos a ser más buenos que la Santísima Trinidad".

El velador de Embassy ha sido advertido de haber cerrado después del horario autorizado (las dos de la madrugada de domingo a viernes y las 2.30 sábados y vísperas). Juan Serrano, el encargado, indica que el martes recibieron una notificación en la que se les instaba a respetar la normativa vigente, pero no le consta que la terraza haya sido denunciada.

Archy disponía de mobiliario no homologado y focos de iluminación no reglamentarios. Su encargado, Francisco Rodríguez, de 38 años, asegura que inmediatamente ha puesto en manos del abogado de la empresa la notificación.

Finalmente, el caso de Tábata es más peliagudo, porque, además de acumular las infracciones anteriores, que se consideran graves, acumula ocho denuncias, según el responsable del local, Héctor Rubín, de 32 años, y 12, según el Ayuntamiento. La primera llegó el día de la inauguración, el 2 junio, porque organizaron una actuación en directo, lo cual está prohibido, según la ordenanza municipal. Esta terraza suele montar originales fiestas (véase EL PAIS del 30 de julio). Otra de las denuncias se debe a que ocupa más espacio del autorizado.

Cada una de estas terrazas paga alrededor de 1,5 millones por la licencia de temporada. A sus encargados les parece exagerado que en pleno agosto "les aprieten las tuercas".

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