Las empresas disparan su beneficio al 18,4% en el primer trimestre por la caída de gastos de personal

Las empresas españolas siguen en un ritmo acelerado de recuperación que no se aprecia en el empleo. En el primer trimestre de 1995 el resultado económico bruto de explotación de las empresas incluidas en la Central de Balances del Banco de España aumentó el 18,4%, un ritmo de crecimiento desconocido desde 1986. El resultado neto, medido en porcentaje sobre el valor añadido bruto, aumentó el 14,7%. Pero las plantillas siguen reduciéndose, en un ajuste laboral sin fin: el volumen de empleo cayó el 2,4% en el primer trimestre de este año sobre el primero de 1994.

La recuperación de las emp...

Las empresas españolas siguen en un ritmo acelerado de recuperación que no se aprecia en el empleo. En el primer trimestre de 1995 el resultado económico bruto de explotación de las empresas incluidas en la Central de Balances del Banco de España aumentó el 18,4%, un ritmo de crecimiento desconocido desde 1986. El resultado neto, medido en porcentaje sobre el valor añadido bruto, aumentó el 14,7%. Pero las plantillas siguen reduciéndose, en un ajuste laboral sin fin: el volumen de empleo cayó el 2,4% en el primer trimestre de este año sobre el primero de 1994.

La recuperación de las empresas españolas es un hecho. Según los datos de la Central de Balances del Banco de España, el Valor Añadido Bruto (VAB) o actividad aumentó en el primer trimestre el 11% y el margen empresarial o resultado bruto de explotación creció el 18,4%, siempre en relación con el primer trimestre de 1994. La comparación inmediata es con el 6,9% que subió el margen empresarial en el último trimestre de 1994 sobre el último de 1993, lo cual indica que se ha producido una aceleración importante de los resultados empresariales.¿Por qué se dispararon los márgenes empresariales en el primer trimestre? En primer lugar, por el crecimiento de la actividad, ya mencionado, del 11 %, que muestra una progresión importante del crecimiento macroeconómico. El segundo factor, muy importante, es la moderación de los gastos de personal. En el primer trimestre de este año aumentaron el 3,3%, resultado de un recorte de empleo evaluado en el 2,4% en el trimestre que ha más que compensado un aumento de las retribuciones medias del 5,8 %.

El ajuste de plantillas se va atemperando. Las cifras del Banco de España dicen que el 54,5% de las empresas redujo empleo en el primer trimestre, frente al 68,9% que recortaron puestos de trabajo en enero-marzo de 1994. Además, se detectan aumentos moderados del empleo en sectores como comercio (aumento del empleo medio de 1,3%) y empresas medianas (entre 100 y 500 trabajadores), con el 0,6% más.

Sea como fuere, la importancia del factor gastos de personal no puede minimizarse, en cuanto que, se supone, las empresas buscan el volumen de empleo óptimo. La comparación con otras épocas de crecimiento económico demuestra que en la actualidad se está tocando fondo en el ajuste del empleo. El 3,3% de aumento en los gastos de personal en 1995 contrasta con el aumento medio del 11,6% en el periodo 1987-1989, en plena fase expansiva anterior.

El peso de los tipos

El tercer factor que explica el beneficio de las empresas es el descenso de los gastos financieros. El Banco de España considera que se está agotando el proceso de recorte de gastos financieros, como puede apreciarse en la secuencia histórica reciente. En este primer trimestre descendieron el 7,4% respecto al primer trimestre de 1994; pero en el primer trimestre de 1994 cayeron el 16,6% respecto al mismo periodo de 1993; en el segundo trimestre también descendieron, el 21,8%; en el tercer trimestre bajaron el 20,94 y en el último del año pasado bajaron el 17,2%.

El Banco de España se muestra cauto al mencionar las razones de este recorte de gastos financieros y no se decide entre el descenso de los tipos de interés o la disminución del endeudamiento. El caso es que el crecimiento del resultado económico bruto, originado por el aumento de la actividad y la moderación de los gastos de personal, y el descenso de los gastos de personal, han hecho crecer los recursos generados por las empresas a una tasa del 28,5%. La rentabilidad media de los recursos propios de las empresas ha pasado del 8,4% en el primer trimestre del 94 al 12,6% en los tres primeros meses de 1995.