Las excavaciones arqueológicas de la plaza de Oriente terminaron ayer

Las excavaciones arqueológicas en la plaza de Oriente, donde el equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Madrid tiene previsto construir un aparcamiento, concluyeron ayer, según manifestó la directora de los trabajos, Esther Andreu.Las investigaciones pusieron al descubierto sótanos y semisótanos del edificio de la Casa del Tesoro, que data del siglo XVIII; la calle del Tesoro; las manzanas 4.33 y 4.32; la calle de la Parra, y los cimientos del convento dé San Gil, hallazgos de "valor histórico, pero no artístico", según Andreu.

El edificio de la Casa del Tesoro, donde funcionab...

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Las excavaciones arqueológicas en la plaza de Oriente, donde el equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Madrid tiene previsto construir un aparcamiento, concluyeron ayer, según manifestó la directora de los trabajos, Esther Andreu.Las investigaciones pusieron al descubierto sótanos y semisótanos del edificio de la Casa del Tesoro, que data del siglo XVIII; la calle del Tesoro; las manzanas 4.33 y 4.32; la calle de la Parra, y los cimientos del convento dé San Gil, hallazgos de "valor histórico, pero no artístico", según Andreu.

El edificio de la Casa del Tesoro, donde funcionaba la administración antigua de la Casa de Austria, fue destruido en la época de José I, quien ordenó el derribo de 20 manzanas del entorno de la plaza de Oriente.

Los trabajos, que comenzaron el pasado mes de septiembre, han abarcado una superficie de 5.000 metros cuadrados y han sido efectuados por un equipo integrado por 24 obreros y otros tantos técnicos (arqueólogos, dibujantes y otros especialistas).

El grupo que realizó las excavaciones elaborará un informe que presentará a la Dirección General de Patrimonio Cultural de -la Comunidad, que decidirá sobre la construcción del aparcamiento en la zona investigada.

Andreu subrayó que este trabajo arqueológico permitirá reconstruir los diferentes momentos de ocupación de la plaza de Oriente entre los siglos IX y XVIII, a partir del análisis de huesos de animales, polen y semillas recogidos en basureros, con los que se podrá conocer las formas de vida y producción de los habitantes de Madrid en el pasado.

Esta investigación aportará "información abundante" sobre la época medieval y moderna, así como cientos de utensilios y restos, entre los que destaca la jamba de una puerta del antiguo alcázar, además de ofrecer datos más exactos sobre la situación de las manzanas en los planos antiguos. La iglesia del alcázar y del palacio, situada en el convento de los franciscanos de San Gil, no se conserva, declaró la directora de las excavaciones.

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