La merma de población hace que 392 municipios reduzcan sus concejales.

La población española nunca superará los 40 millones de habitantes, a la vista del menguado crecimiento que experimentan los índices de natalidad. En muchas provincias la población retrocede, circunstancia que ha originado una reducción del número de concejales electos en 392 municipios, frente a los 178 que los aumentarán en los comicios de mañana, con arreglo a la actualización del censo electoral.

El retrato demográfico, sin embargo, sigue un curso ajeno al del censo electoral. Mientras éste se ajusta a las oscilaciones de los empadronamientos actualizados anualmente, aquél se efectú...

La población española nunca superará los 40 millones de habitantes, a la vista del menguado crecimiento que experimentan los índices de natalidad. En muchas provincias la población retrocede, circunstancia que ha originado una reducción del número de concejales electos en 392 municipios, frente a los 178 que los aumentarán en los comicios de mañana, con arreglo a la actualización del censo electoral.

El retrato demográfico, sin embargo, sigue un curso ajeno al del censo electoral. Mientras éste se ajusta a las oscilaciones de los empadronamientos actualizados anualmente, aquél se efectúa cada 10 años, de manera que los últimos datos disponibles son los correspondientes a la fotografía del censo de población de 1991. Ese, año la población de hecho ascendía a 38.999.181 habitantes, frente, a los 38.915.563 de derecho.Pero la población no se estanca, por mucho que sólo se la mida cada 10 años. Los estadísticos realizan proyecciones demográficas, en base a los índices de nupcialidad, nacimientos y mortalidad. Las proyecciones de hace dos años sobre el crecimiento de la población española eran mucho más optimistas que los hechos. Éstos demuestran que la, población de derecho aumenta a un ritmo más reducido del previsto.

Para el año pasado cifraban en 39.143.394 el número de españoles. Esa cantidad se elevará a 39.286.321 en el año 2000, a partir del cual comenzará a descender paulatinamente, hasta disminuir en el año 2020 a poco más de 36,6 millones. Esta merma se debe a la escasa contribución de bebés que aportan comunidades como Aragón, Asturias, Cantabria, Galicia, Castilla y León y el norte de Castilla-La Mancha. En el lado opuesto contribuyen a equilibrar el balance de la población el crecimiento de las dos ciudades más populosas, como Barcelona y Madrid, todo el sur del país, Castilla-La Mancha y Extremadura.

Baleares, con más renta

Esta tendencia demográfica no se corresponde siempre con el puesto que ocupa cada provincia en la lista del PIB (producto interior bruto o riqueza producida) por habitante, aunque podría deducirse -con excepciones- que las que más crecen en población ocupan los últimos puestos por generación de riqueza, mientras las que pierden habitantes se sitúan en los puestos medios de la lista del PIB.

Según la distribución provincial de la renta entre los años 1992 y 1993 elaborada por el BBV, las familias de Baleares ocupan el primer puesto de España desde 1985. Su PIB por habitante también es el más alto; el segundo puesto lo ocupa Girona, que gana una posición con relación a 1985. En tercer lugar está Madrid, que escala dos posiciones. Le siguen Tarragona y Álava, que pierde tres puestos; sexta es Barcelona, y séptima Navarra, que gana cuatro posiciones. Guadalajara salta al octavo puesto, desde el decimosexto que ocupaba en 1985; Zaragoza pierde una posición y se sitúa en el noveno lugar, mientras el décimo , sin variaciones, es para Lleida. Al final de la lista figuran Badajoz (última posición), Granada, Jaén, Córdoba y Cádiz.