La moneda unica ahorrará a Ios europeos cinco billones al año en costes de transacción

La moneda única ahorrará a los europeos un promedio anual de cinco billones de pesetas y disminuirá los tipos de interés, sobre todo de los créditos a largo plazo. Así lo calcula el Libro verde recién elaborado por la Comisión Europea, que escalona la tercera etapa de la unión monetaria en tres fases: lanzamiento, inicio y plena introducción.El libro destaca la contribución de la moneda única a la inversión y el empleo, porque llegará tras la Sujeción de los déficit públicos y reducirá el coste del endeudamiento. Y subraya el ahorro de los costes de transacción, tanto del cambio de mone...

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La moneda única ahorrará a los europeos un promedio anual de cinco billones de pesetas y disminuirá los tipos de interés, sobre todo de los créditos a largo plazo. Así lo calcula el Libro verde recién elaborado por la Comisión Europea, que escalona la tercera etapa de la unión monetaria en tres fases: lanzamiento, inicio y plena introducción.El libro destaca la contribución de la moneda única a la inversión y el empleo, porque llegará tras la Sujeción de los déficit públicos y reducirá el coste del endeudamiento. Y subraya el ahorro de los costes de transacción, tanto del cambio de monedas (las comisiones y el retraso de dos días en computar una transferencia exterior), como de los seguros de cobertura del tipo de cambio, que "lejos de poderse minusvalorar se calculan en un 0,5% del PIB comunitario, 30.000 millones de ecus", unos cinco billones de pesetas anuales

La tercera etapa de la unión monetaria tendrá tres fases. El lanzamiento (fase A) dura un máximo de doce meses, a partir de que los quince Gobiernos deciden (el 31 de diciembre de 19961 o el 1 de julio de 1998) dar el pistoletazo de salida, fijando la fecha del inicio y los países que acceden a ella. Se adaptan las legislaciones europea y nacionales en las que figuran referencias de divisas.

Todavía no se han establecido las paridades fijas, lo que puede debilitar a las monedas que no entren. El peligro es la incertidumbre. Quedarán a los pies de los caballos especulativos, aunque el libro lo minimiza, asegurando que "se acredita la continuidad de una política monetaria no inflacionista, no deberíán aflorar presiones" adicionales. También inquieta el aumento de la especulación hasta que se fijen, un año después (fase B) las paridades fijas: la Comisión sólo receta una "credibilidad". La fase B es la más complicada. Empieza cuando el Consejo fija las paridades y, prevé la Comisión, establece una "única política monetaria", pues "deja de haber distintas monedas" en sentido económico" porque "se convierten en diferentes expresiones de una única e idéntica realidad monetaria", aunque existen a nivel legal. Los bancos operan obligatoriamente en ecus -salvo en la relación con sus clientes: los consumidores siguen usando la moneda nacional-, con el Sistema Europeo de Bancos Centrales.

La tercera fase duraría sólo unas semanas, a fin de restringir la "dualidad de divisas": se ,introducen las piezas y billetes de ecu, sólo la moneda* europea tiene curso legal y todos los medios de pago se convierten a ella, aunque Ios viejos billetes nacionales podrán cambiarse sin coste alguno.

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