Alemania insta a EEUU a que aumente el ahorro y baje el déficit

El dólar no se recuperará frente al marco y el yen hasta que la Administración Clinton y el Congreso estadounidense tomen acciones para frenar la caída del ahorro doméstico y reduzcan el déficit fiscal, señaló el presidente del Bundesbank, Hans Tietmeyer, en una entrevista que publicó ayer el diario The New York Times. "El problema está muy claro: una baja tasa de ahorro, un déficit presupuestario relativamente alto sin ninguna seguridad de que se reducirá en el largo plazo, y una fuerte posición de deudor neto", explicó Tietmeyer. "Éstas son las cuestiones que tienen que solucionarse"....

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El dólar no se recuperará frente al marco y el yen hasta que la Administración Clinton y el Congreso estadounidense tomen acciones para frenar la caída del ahorro doméstico y reduzcan el déficit fiscal, señaló el presidente del Bundesbank, Hans Tietmeyer, en una entrevista que publicó ayer el diario The New York Times. "El problema está muy claro: una baja tasa de ahorro, un déficit presupuestario relativamente alto sin ninguna seguridad de que se reducirá en el largo plazo, y una fuerte posición de deudor neto", explicó Tietmeyer. "Éstas son las cuestiones que tienen que solucionarse".Tietmeyer reconoció que la actual situación de la economía estadounidense -una inflación baja, un crecimiento moderado y un mercado de valores en auge no justifica la caída del dólar del 13% y del 20% frente al marco y el yen, respectivamente, en lo que va de año. Sin embargo, sí cree que los mercados ya no sólo se fijan en la posición actual, sino en las perspectivas de futuro. El presidente del Bundesbank criticó duramente la escasa firmeza de EE UU a la hora de encontrar una solución a largo que garantice el control del déficit fiscal.

La debilidad del dólar y, en consecuencia, la fortaleza del marco y del yen ha disparado el precio de las exportaciones alemanas y japonesas, provocando fuertes protestas en la industria de ambos países. El canciller Helmut Kohl ha sido el que más ha criticado la indiferencia estadounidense ante la caída de su moneda. Tietmeyer reconoce que, no recuerda tantos ataques a la política estadounidense desde que el presidente Ronald Reagan, a mediados de los ochenta, dejó que los déficit fiscal y comercial se dispararan.

Archivado En