Veo, veo

Una exposición enseña no violencia a los chavales de Arganda

Cuando los colegiales de Arganda del Rey (28.000 habitantes) vuelvan a jugar al Veo, veo después de haber pasado por la exposición del mismo título, no seguirán pensando que todo lo que se ve es como parece. Así se lo enseña una de las ocho fases del circuito de juegos que la organización no gubernamental Asamblea de Cooperación por la Paz ha traído a Arganda del Rey.

Veo, veo es una experiencia de origen holandés, elaborada por varias asociaciones pacifistas europeas, que pretende educar a los niños de 10 a 13 años en la paz, la convivencia y el respeto a los derecho...

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Cuando los colegiales de Arganda del Rey (28.000 habitantes) vuelvan a jugar al Veo, veo después de haber pasado por la exposición del mismo título, no seguirán pensando que todo lo que se ve es como parece. Así se lo enseña una de las ocho fases del circuito de juegos que la organización no gubernamental Asamblea de Cooperación por la Paz ha traído a Arganda del Rey.

Veo, veo es una experiencia de origen holandés, elaborada por varias asociaciones pacifistas europeas, que pretende educar a los niños de 10 a 13 años en la paz, la convivencia y el respeto a los derechos humanos y la vida en la tierra; todo a través del juego contra los tópicos.

Y como un juego toman los chavales la exposición. Comienzan el recorrido en parejas, con un pasaporte especial en el que van anotando sus propias respuestas a las preguntas que se plantean. En la fase de "verdadero o falso" tienen que gritar para preguntarse. Aquí, Carlos lo ha tenido fácil con la pregunta: "¿A los chicos marroquíes les gustan las patatas fritas?". Se ha dirigido a su compañero Rachid, que rápidamente y sonriendo ha dicho: "¡Sí!".

Veo, veo

Auditórium Víctor Jara. Paseo de la Estación, s/n. Hasta el 3 de febrero. Grupos escolares: de 9.30 a 13.30 y de 15.15 a 16.30. Público: de 17.00 a 21.00. Gratis.

La facilidad en la convivencia que se quiere demostrar se prueba en el momento en que los niños gitanos pueden explicar a sus compañeros payos que la frase de un texto del panel, que no entienden, está escrita en caló.

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