Un 'comando' integrista asesina a un comerciante francés en Argel

Un comando integrista, compuesto por dos personas, asesinó ayer en pleno centro de Argel, cerca de la plaza de Port Said, al comerciante francés de origen judío Joseph Belaiche, elevando así a 76 el número de extranjeros muertos en Argelia (26 de ellos son franceses) en poco más de dos años. Paralelamente, tres funcionarios de aduana murieron en otro atentado en Tidjelabine, al este de Argel.Horas antes de conocerse este asesinato, el periódico local Liberté informaba del asalto e incendio, en la noche del viernes al sábado, de un hotel situado en la localidad de Tala-Guilef, en la región mont...

Un comando integrista, compuesto por dos personas, asesinó ayer en pleno centro de Argel, cerca de la plaza de Port Said, al comerciante francés de origen judío Joseph Belaiche, elevando así a 76 el número de extranjeros muertos en Argelia (26 de ellos son franceses) en poco más de dos años. Paralelamente, tres funcionarios de aduana murieron en otro atentado en Tidjelabine, al este de Argel.Horas antes de conocerse este asesinato, el periódico local Liberté informaba del asalto e incendio, en la noche del viernes al sábado, de un hotel situado en la localidad de Tala-Guilef, en la región montañosa y turística de la Cabilia, a unos 100 kilómetros al sur de Argel. En este atentado murió un empleado del establecimiento, mientras el director resultó gravemente herido.

El asesinato del comerciante francés, cuando se encontraba sentado al volante de su vehículo, y el atentado contra el hotel de la Cabilia se producen en plena ofensiva integrista, desencadenada en respuesta al proceso de diálogo que trata establecer la oposición con el Gobierno del presidente Liamin Zerual, quien ha convocado para antes de fin de año elecciones presidenciales, en un intento de solucionar políticamente la crisis de Argelia.

Mientras oposición y Gobierno tratan de buscar puntos de convergencia, la violencia se incrementa, siguiendo una dinámica que se repite. metódicamente desde hace más de tres años cada vez que se habla de diálogo.

Pero, al mismo tiempo, estos atentados, junto con otras acciones y asesinatos registrados, en las pasadas semanas, configuran el prólogo de un Ramadán, que se iniciará a primeros de febrero, que se augura tan sangriento y violento como el del pasado año.

En perfecta sintonía con esta ofensiva integrista, y en un intento de complicar aún más la situación, se multiplican los comunicados, de dudosa autenticidad, del Grupo Islámico Armado (GIA), la organización integrista radical más importante de Argelia. El último comunicado de estas características se difundió ayer desde Londres y en él se amenaza de muerte a todos los periodistas de la radio y la televisión de Argelia si no abandonan inmediatamente su trabajo.

Todo ello se produce poco después de finalizar, el sábado, la reunión de ministros del Interior de seis países mediterráneos (Argelia, España, Francia, Italia, Portugal y Túnez) en la que se ha concretado una especie de carta programática para coordinar los esfuerzos contrar la oleada de integrismo violento en Magreb.