La huelga de Renfe provoca fuertes atascos en los accesos a Madrid

La huelga de los trenes de cercanías de Renfe y la incertidumbre de muchos usuarios sobre la huelga de metro (fue suspendida en la noche del domingo) empujaron ayer a los ciudadanos a tomar sus vehículos para incorporarse a sus puestos de trabajo o estudio. Todo se tradujo ayer en una circulación intensa en algunas zonas de la ciudad y fuertes retenciones en las carreteras de acceso a Madrid. La huelga de los empleados de Renfe transcurrió sin incidentes; tan sólo cabe destacar los retrasos de los trenes que cubrieron los servicios mínimos en las horas punta.

Los ciudadanos de los m...

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La huelga de los trenes de cercanías de Renfe y la incertidumbre de muchos usuarios sobre la huelga de metro (fue suspendida en la noche del domingo) empujaron ayer a los ciudadanos a tomar sus vehículos para incorporarse a sus puestos de trabajo o estudio. Todo se tradujo ayer en una circulación intensa en algunas zonas de la ciudad y fuertes retenciones en las carreteras de acceso a Madrid. La huelga de los empleados de Renfe transcurrió sin incidentes; tan sólo cabe destacar los retrasos de los trenes que cubrieron los servicios mínimos en las horas punta.

Los ciudadanos de los municipios de la región con servicio de cercanías sufrieron ayer alguna apretura en los andenes de las estaciones, pero pudieron llegar a sus lugares de destino. Los servicios mínimos (de entre el 50% y el 75% de la oferta en horas punta) se cumplieron con normalidad. La única alteración que los trenes notaron fueron retrasos por la acción de los piquetes en la estación de Villaverde Alto. Los trabajadores organizados en piquetes pulsaron la alarma de sendos convoyes de las líneas C-4 (Atocha-Parla) y de la C-5, que hace el trayecto Móstoles Atocha-Fuenlabrada y es la más utilizada en España (245.000 viajeros diarios de media), lo que produjo retrasos sobre los horarios previstos, según informó Renfe. El promedio diario de utilización de las nueve líneas de Cercanías de Madrid es de medio millón de viajeros. Según la compañía ferroviaria, se han visto afectados por el paro de ayer unos 100.000 viajeros.En Madrid, 3.500 trabajadores de la compañía ferroviaria hacen funcionar los trenes de cercanías, que conectan con las poblaciones más populosas del sur, noroeste y del corredor del Henares. En el turno de la noche del domingo al lunes pararon el 31% de los empleados. El seguimiento fue similar en los siguientes turnos. Fuentes sindicales, informa la agencia Efe, aseguraron que en los talleres siguieron la huelga el 95% de los trabajadores.

Tráfico intenso

El gabinete municipal de Tráfico informó de que los paros de Renfe y las dudas sobre el funcionamiento del metro marcaron una jornada ya de por sí complicada, al ser lunes. El aumento del número de vehículos adelantó la hora punta de la mañana (que se sitúa entre las siete y las nueve y media) en las rondas, plaza de Castilla, O'Donell y M-30. La autovía que circunvala la ciudad estuvo especialmente congestionada en la franja del río Manzanares y en sus tramos norte y oriental.El acceso por la mañana a la ciudad se complicó bastante en las carreteras de Barcelona (N-II),Valencia (N-III), Extremadura (N-V), Colmenar Viejo (N-607) y Toledo (N-401), según el Ayuntamiento.

Los próximos paros de Renfe están convocados para los días 22, 23 (por el comité de empresa) y 30 de diciembre, en el que la huelga está convocada por el sindicato de maquinistas, SEMAF.

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